Tras el anuncio el pasado viernes de las subidas a aplicar en tres de los aparcamientos subterráneos de Donostia, incrementos que serán del 23%, algunas voces críticas, como las del portavoz del PP en el Ayuntamiento, Borja Corominas, no se han hecho esperar.
“La subida de la tarifa de los parkings no va a mejorar la movilidad de San Sebastián, pero sí va a perjudicar a los donostiarras”, ha asegurado el edil del PP.
“La adopción de esta medida hay que contemplarla desde un sentido amplio. Nos quedamos con el incremento de la tarifa, pero tan importante como eso es que surge la posibilidad, que no existía hasta ahora, de que los residentes puedan aparcar por dos euros la noche. Y es una opción que beneficia a los donostiarras, no les perjudica”, ha destacado por su parte el alcalde de Donostia Eneko Goia.
Goia también ha querido poner en valor el hecho de que los aparcamientos “vayan a ofrecer plazas para otro tipo de vehículos que no son automóviles, como las bicicletas o los patinetes”.
“Existen una serie de novedades y mejoras que van asociadas al incremento de las tarifas, una medida que entiendo que no tiene que perjudicar a los donostiarras”, ha abundado.
Por contra, cree que “beneficia” los intereses de las y los donostiarras en algunos lugares de la ciudad “porque proporciona posibilidades para estacionar que hasta ahora no existían”.
Por último, Goia ha aconsejado hacer uso del “muy potente” sistema de transporte público que funciona en la ciudad, apostando así por la sostenibilidad.
Todas las medidas, en breve
Por su parte la concejala de Movilidad, Olatz Yarza, ha explicado que algunas de las medidas anunciadas el viernes que afectan a los aparcamientos se implantarán de inmediato, de la mano de las acciones diseñadas para verano, entre las que está la subida tarifaria.
Otras, en cambio, tardarán algo más, dado que requieren la realización de adaptaciones, como es el caso de los aparcamientos de bicicletas, aunque se trabaja para puedan estar en funcionamiento en el menor plazo posible.
Yarza, además, ha querido llamar la atención sobre el hecho de que la vigencia de la subida de tarifas es de tres meses, la temporada de verano, mientras que otras medidas, como la oferta dirigida a los residentes, tiene una duración de un año y se ofrece “no solo en los parkings de Okendo, Boulevard y La Concha, sino también en los de Plaza de Cataluña y Easo”.
En la presentación de las medidas, la concejala de Movilidad ya destacó que las mismas, entre otros objetivos, buscan lograr sacar al vehículo privado del Centro, abogando por “una movilidad más sostenible”.
Corominas, por su parte, no comparte estas apreciaciones y considera que la aplicación de subidas del 23% es “una excusa más para hacer caja” con efectos en la ciudadanía donostiarra. “El turista que viene a San Sebastián no mira lo que cuesta antes de aparcar y esta medida no le va a desanimar para llegar hasta el mismísimo Centro”.