El alcalde Donostia, Eneko Goia, ha vuelto a manifestar su confianza en que la dirección de Costas aceptará las alegaciones presentadas por el Ayuntamiento para establecer la franja de servidumbre en los cuarteles de Loiola en 20 metros.

Goia ha recordado que en estas instalaciones militares se había aplicado una excepción a los márgenes de servidumbre establecidos en la Ley de Costas de 1998, pasando de 100 a 20 con el argumento de que eran para defensa nacional.

Esta misma Ley, ha destacado, establece que en todos los ámbitos que tenían la catalogación de urbanos antes de su aprobación se fijará esta misma servidumbre. 

Esta es la argumentación que tanto el Ayuntamiento, como el Ministerio de Defensa y Ura esgrimen en sus alegaciones.

Alegaciones en plazo

Estas alegaciones se han preparado en plazo, un plazo que finalizará el 28 de junio. “Creemos que la respuesta normal y lógica será que se establezca la franja de 20 metros por ser terrenos urbanos”, ha declarado Goia.

El primer edil donostiarra ha reiterado que el Ayuntamiento no firmará ninguna escritura hasta que Costas dé luz verde al desarrollo de la operación contemplando una franja de servidumbre de 20 metros.

El propio convenio en el que se establecía el acuerdo de adquisición de los cuarteles preveía la posibilidad de prorrogar dos meses la firma de las escrituras si había alguna tramitación administrativa que se dilataba por encima de los seis meses de plazos fijados inicialmente”, ha explicado Goia, que ha recordado que “éste sería el caso”, por lo que el Ayuntamiento ha solicitado la prórroga contemplada. ”Tendremos dos meses para cumplimentar el trámite”, ha añadido. 

El Ayuntamiento necesita tener la seguridad de que finalmente la franja de servidumbre es de 20 metros y no de 100, porque toda la operación está calculada así. No tiene ninguna lógica que el Ayuntamiento proceda a la adquisición de un bien cuya valoración se ha hecho sobre una franja de servidumbre de 20 metros. El valor sería muy distinto y la valoración estaría mal hecha”, ha concluido Goia.