Las asociaciones vecinales Amara Bai y Erdian Bizi, así como la asociación de comerciantes Dendartean, que presentó un recurso a los tribunales contra el plan para crear un centro comercial en la ladera de San Bartolomé, han criticado este jueves las prospecciones del terreno que han dado comienzo esta semana, una tarea que es obligada antes de la obra por ser una zona de presunción arqueológica.

En un comunicado hecho público, las tres asociaciones han asegurado que "con la excusa de realizar trabajos de prospección arqueológica, la coalición PNV-PSOE que dirige el Ayuntamiento donostiarra está permitiendo que se destroce el terreno y el arbolado de la parte norte del cerro de San Bartolomé, en su deriva hacia la completa desnaturalización y artificialización del mismo". Asimismo, lamentan que "quienes dirigen el Ayuntamiento donostiarra se aparten de los parámetros de sostenibilidad y defensa del medio ambiente que ellos mismos propugnan".

Los colectivos contrarios al centro comercial y parking subterráneo proyectado en la ladera añaden el complejo "se encuentra sub iudice, ya que el recurso de la asociación de comerciantes Dendartean ante el Tribunal de Justicia del País Vasco sigue su curso". Por ello, añaden que "la actividad de las excavadoras solo se puede entender como una maniobra de hechos consumados para inducir a pensar que una vez destrozado el monte es mejor ya hacer un centro comercial".

El recurso que presentaron el pasado mes de abril, y que no ha sido aún respondido por los tribunales, argumenta que el plan de Movilidad Urbana Sostenible vigente obliga a analizar el impacto de la movilidad urbana en clave de sostenibilidad, ya que el aparcamiento de 270 plazas previsto, 200 de ellas de rotación, puede tener efectos en la circulación.

El recurso también alude a la contaminación y el ruido y a la falta de estudios al respecto. La protección paisajística de la ladera, que será transformada totalmente con el centro comercial, es otra de las ideas en las que se basa la demanda.

En su comunicado, las dos asociaciones vecinales y la entidad comercial Dendartean aseguran que el centro comercial es “de exclusivo interés especulativo y absolutamente innecesario desde el punto de vista económico-social, además de crear más contaminación y problemas circulatorios y urbanísticos de diversa índole imposibilitará la creación de un parque para disfrute de la ciudadanía en una zona saturada de inmuebles”.

Aunque la actividad de maquinaria en la ladera de San Bartolomé que comenzó el lunes no es propiamente la obra del centro comercial, los trabajos que se llevan a cabo sí tienen relación con la intervención prevista, ya que buscan analizar el terreno por si se hallasen vestigios históricos protegidos, que habría que conservar antes de deshacer el terreno para construir el complejo de tiendas y de aparcamiento.

Dos claustros

También se llevaron a cabo prospecciones arqueológicas hace diez años en la zona del Alto de San Bartolomé, donde se encontraron 3.000 metros cuadrados de espacio construido, con dos claustros, un pozo y una galería cubierta de un monasterio. Se identificó la sala capitular, el refectorio, la cocina y otras dependencias. 

En la galería del claustro se hallaron 21 tumbas de un amplio periodo entre el siglo XIII y XVIII. Cerámicas, monedas, restos humanos y de ajuares también aparecieron y se depositaron en el Centro de Patrimonio mueble de Gipuzkoa, Gordailua.

En esta ocasión, no se prevé encontrar grandes hallazgos ya que el terreno está en cuesta y no parece que pudiera haber construcciones en el pasado, según señalaron fuentes de San Bartolomé Muinoa, responsable de la intervención en San Bartolomé. La sociedad, de capital público y privado, está en conversaciones para vender la parcela destinada a centro comercial. Por el momento, la intervención no tiene licencia de obra.