La asociación de vecinos Parte Zaharrean Bizi ha reclamado al Ayuntamiento de Donostia que cierre definitivamente los bares que carecen de actividad con el fin de reducir la proporción de negocios hosteleros en el barrio antiguo de Donostia, que es de uno por cada 30 habitantes. Recientemente, la entidad vecinal pidió controlar los almacenes de hostelería.

La asociación de vecinos asegura que el Ayuntamiento no hace uso de la herramienta legal existente que, según señala, supone que la licencia de un bar caduca si transcurren seis meses sin que tenga actividad. En concreto, la ordenanza de bares dice que las licencias de apertura y funcionamiento de establecimientos hosteleros “se declararán caducadas una vez transcurran seis meses desde la comprobación del cese efectivo de las mismas”, recuerda Parte Zaharrean Bizi.

Es decir, que para que comience a correr el plazo, es necesario que el Ayuntamiento compruebe primero la inactividad del local. Pero, dice la asociación, “eso es lo que falla porque el Ayuntamiento de Donostia ni revisa ni verifica que hay bares cerrados”. 

“Desinterés”

“Visto el desinterés”, añade el colectivo, en marzo de 2022 envió al Consistorio un listado de once bares de la Parte Vieja que estaban cerrados. Desde entonces, han remitido otros trece escritos para reclamar una actuación en torno a ellos, de modo que pierdan la licencia y se reduzca el número de establecimientos hosteleros en el barrio. Según aseguran, actualmente hay un bar por cada 30 vecinos.

La respuesta municipal, dice Parte Zaharrean Bizi, fue que tres de los bares señalados ya habían reabierto sus puertas en el momento de la inspección, aunque Parte Zaharrean Bizi critica que la revisión se llevó a cabo más de 300 después del aviso en dos de los casos y de 500, en el tercero.