Donostia. El Ayuntamiento de Donostia pidió ayer que el espacio marino frente a los acantilados de Ulia sea declarado Lugar de Importancia Comunitaria (LIC) y su consiguiente inclusión en la Red Natura 2000. Recomendó lo mismo para Jaizkibel, de manera que se conecte con el espacio marino protegido en Iparralde, en las dimensiones indicadas en la propuesta de Oceana y el Colegio Oficial de Biólogos.
El alcalde de Donostia, Juan Karlos Izagirre, el concejal de Medio Ambiente, Axier Jaka, y el representante del Colegio de Biólogos del País Vasco, Iñaki Azkarate, señalaron que esta propuesta será llevada a Junta de Gobierno para su aprobación, aunque ésta depende de otras instituciones.
El Gobierno de Bildu remitirá la solicitud al citado ministerio y al Gobierno Vasco, quienes deben decidir sobre el nuevo marco de protección, como límite, en diciembre de 2012.
En la propuesta realizada por Oceana y el Colegio Oficial de Biólogos de Euskadi se plantea la protección de un espacio marino de 18.856 hectáreas de mar frente a las costas de Ulia y de Jaizkibel para la creación de un corredor ecológico marino entre Donostia y Biarritz.
Según explicó Azkarate, en esta zona se han detectado gran cantidad de hábitat naturales y comunidades biológicas con arenales submarinos, arrecifes y multitud de especies como marsopas, delfines mulares, esponjas, algas, anémonas y diversas, variedades de peces, entre otros.
Por su parte, Izagirre reiteró el compromiso de Bildu con la naturaleza y el ecosistema, al tiempo que remarcó que quienes les critican por su falta de inversión "deben saber que no hay mejor inversión para el futuro que un plan de defensa de la naturaleza, porque es una inversión que no tiene precio". Asimismo, hasta que se dé la aprobación, el alcalde aseguró que el Consistorio tratará el citado litoral marítimo como ya estuviese protegido.
Por otro lado, el Ayuntamiento aprobará hoy que se destine una partida de 10.500 euros al programa de Unicef para paliar la grave crisis alimenticia que sufre la población de Somalia y el cuerno de África.
Unicef ha reivindicado la necesidad de llevar a cabo acciones para salvar la vida de unos 500.000 niños con desnutrición aguda grave y atender a 1.649.000 niños con desnutrición aguda moderada en Kenia, Somalia, Etiopía y Djibuti.
La ONG ha trasladado la necesidad urgente de financiar con 31,8 millones de dólares la ayuda humanitaria a los niños y mujeres afectadas por la crisis en estos cuatro países.