- El tenis vasco vivió el pasado fin de semana cómo el diamante en bruto que es Ane Mintegi (Idiazabal, 2003) deslumbró al mundo del deporte proclamándose campeona del Wimbledon junior en una durísima semana en la que llegó a disputar siete partidos. De hecho, se trata de la primera tenista estatal en lograr este título, lo que añade aún más mérito a su hazaña. No es de extrañar que, tras haber conseguido el triunfo en un torneo de esta envergadura, las expectativas sobre su futuro hayan alcanzado cotas que ni la propia tenista guipuzcoana imaginaba hace unos meses. A pesar de ese éxito, Mintegi continúa centrada en los torneos que tenía fijados en su calendario y esta semana se encuentra en Vitoria-Gasteiz participando en el Araba World Tennis Tour que se está celebrando en las pistas de la Peña Vitoriana.
Mintegi comenzó su participación en el torneo el pasado martes en la modalidad de dobles y ayer se estrenó en el cuadro individual con el duelo de dieciseisavos de final ante la turca Pemra Ozgen. La de Idiazabal, a pesar de que sufrió una lesión en la zona abdominal, logró el pase a octavos con una victoria por 3-6, 6-3 y 6-3 y, acto seguido, recibió un homenaje por parte de la Peña Vitoriana Tenis Club, en reconocimiento de su actuación en Wimbledon. El presidente de la entidad, Iñigo Area, se encargó de entregarle un Celedón de bronce, acompañado de un aurresku de honor. “La verdad es que ha sido un momento muy emocionante. Vivirlo con la familia al lado es muy bonito y un motivo para sentirse orgullosa”, explicó Mintegi a este periódico tras el homenaje.
Afortunadamente, la jugadora se encuentra bien y el problema en el abdominal “es solo una molestia” y no le va a impedir seguir disfrutando del torneo. “La verdad es que el ambiente es espectacular, ha habido un momento en el que he pensado que igual tenía que retirarme, pero afortunadamente he podido seguir y remontar el partido”, celebró. No extraña que los problemas físicos lleguen, ya que la acumulación de partidos y el impacto mediático de su victoria pesan. “La verdad es que está siendo una paliza, jugar durante una semana entera en hierba es duro, pero es lo que me toca si quiero dedicarme a ello. También estoy teniendo que atender a medios de comunicación; no es fácil gestionarlo con 17 años”, argumenta.
En cualquier caso, a pesar de su juventud, está demostrando una gran fortaleza física y mental. Prueba de ello fue la remontada de ayer pese a las molestias y la protagonizada en la final de Wimbledon, que comenzó perdiendo 2-6. No extraña, por lo tanto, que tenga referentes como Carla Suárez o Rafa Nadal, que llevan el sacrificio por bandera. “Me parece que lo que ha hecho Carla Suárez tiene un mérito increíble. Pasar por lo que ha pasado y volver a competir es digno de admirar”.
Quizá hay que remontarse a su infancia para entender la dureza de Mintegi, que comenzó jugando a pelota siendo la única chica y se decantó por el tenis a los nueve años cuando se empezó a notar la diferencia de fuerza. Desde entonces, ha trabajado duro para poder dedicarse a este deporte y el esfuerzo comienza a dar sus frutos. “Mi sueño es poder ser tenista profesional, estoy luchando por ello”. Desde luego, va muy bien encaminada.
“Mi sueño es poder dedicarme al tenis y estoy luchando por conseguirlo”
“Mi gran referente es Carla Suárez, me parece que tiene un mérito enorme lo que ha hecho”
“El homenaje ha sido muy emocionante, es bonito poder vivirlo junto a mi familia”
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