- La comisión disciplinaria de la liga francesa se reunirá mañana para decidir sobre las sanciones a los cinco jugadores expulsados en el PSG-Olympique de Marsella, disputado este domingo en el Parque de los Príncipes y que terminó como el rosario de la aurora. Si escuece de manera especial perder el clásico galo, encuentro que levanta las más bajas pasiones, a la derrota se puede añadir un duro castigo para el campeón parisino. En la trifulca estuvo implicado Neymar, que puede ser duramente castigado. Del PSG, además, fueron expulsados Layvin Kurzawa y Leandro Paredes, y del OM Darío Benedetto y Jordan Amavi, protagonistas principales de la tangana multitudinaria que cerró el encuentro.

De por medio, y pendiente de supervisión por los comités de la liga francesa, también está un escupitajo de Ángel Di María destinado al rostro de Álvaro González, génesis de la trapisonda que se montó después, ya con las redes sociales como campo de batalla. El VAR advirtió al árbitro que mirara la serie de collejas que le había arreado Neymar al defensa cántabro. El árbitro lo hizo y expulsó al brasileño, alimentando el fuego de su indignación.

La cólera de Neymar se desató porque, según afirma, Álvaro le profirió insultos racistas. Rancio y viejo truco para sacar de quicio al rival y cada vez más en desuso ante el escrutinio de las cámaras, que no se pierden ni el parpadeo de los jugadores.

Los comités revisarán las imágenes del VAR para comprobar si las acusaciones de Neymar son ciertas. Se trata de un personaje famoso y mediático, condición que ha ejercido para propagar al mundo su indignación contra Álvaro, entrando en un terreno muy delicado, el racismo, y entablando un ácido rifirrafe en las redes con el exjugador del Villarreal. Ya de mañana, Neymar escribió en Twitter: "Ahora quiero ver la imagen del racista llamándome mono hijo de puta... Yo fui expulsado, ¿y él?", a lo que Álvaro contestó: "No existe lugar para el racismo. Carrera limpia y con muchos compañeros y amigos en el día a día". El defensor acompañó su comentario de una fotografía multirracial. Añadió: "A veces hay que aprender a perder y asumirlo en el campo, increíbles tres puntos hoy",

La reacción de Neymar fue volcánica: "No eres hombre para asumir tu error". "¡No te respeto! ¡No tienes carácter! Asume lo que dices... Sé un hombre. Racista".

Álvaro, central de 31 años, jugó la temporada pasada como cedido en el OM. Lo hizo tan bien que el club marsellés ejecutó la cláusula de compra, de cuatro millones de euros.

Lo que no niega el defensa de Potes es si realmente insultó con esa gravedad a Neymar, al margen de que no se considere racista.

El PSG arropa a su encolerizada estrella y en Brasil corre la indignación. El OM defiende la integridad de Álvaro. Una comisión independiente de la liga decidirá según el informe arbitral y en las imágenes de televisión. El escupitajo le puede costarle a Di María seis partidos. Lo de Álvaro González es mucho peor. Se expone a un linchamiento público.