La selección española masculina de fútbol, con Beñat Turrientes, Jon Pacheco y Sergio Gómez en plantilla, se juega esta tarde desde las 17.00 horas entrar en la pelea por las medallas de los Juegos Olímpicos de París. Los de Santi Denia disputarán los cuartos de final ante Japón en el Groupama Stadium de Lyon, sede del Olympique de Lyon. Si logran vencer, se quedarán a un partido de tocar metal, al igual que hicieron los realistas Mikel Oyarzabal, Martin Zubimendi y Mikel Merino en los Juegos de Tokio (plata).

Gómez, el único titular

Visto el bloque que ha utilizado el seleccionador albaceteño, lo más probable es que el único jugador txuri-urdin que dispute el encuentro desde el inicio sea Sergio Gómez, uno de los fichajes de este verano. El exjugador cityzen es uno de los líderes del equipo, además de ser el segundo capitán tras Abel Ruiz. En el primer choque ante Uzbekistán materializó el 1-2 definitivo tras errar una pena máxima, y en la victoria ante la República Dominicana volvió a ser clave (1-3).

Por su parte, la suplencia de Turrientes en las dos primeras jornadas sorprendió a propios y extraños, ya que el beasaindarra venía siendo el eje de la medular de la selección sub-21. A pesar de ello, Denia ha preferido incluir a Aimar Oroz, jugador de Osasuna, y Fermín, centrocampista del Barça. En el último partido, sin nada en juego, el guipuzcoano volvió a gozar de la titularidad, pero fue sustituido en el minuto 60 tras un discreto partido.

El tercero en discordia es Jon Pacheco, uno de los futbolistas que mayor protagonismo puede coger en la próxima temporada tras el traspaso de Le Normand al Atlético de Madrid. Muy a su pesar, el seleccionador español prefiere a la pareja formada en La Masía, compuesta por Eric García y el joven Pau Cubarsí. Además, en el encuentro ante Egipto, el de Elizondo cometió un error grave que supuso el momentáneo 0-2 de los africanos.

Japón, siempre peligroso

La selección nipona se metió en los cuartos de final tras pasar como primera de grupo, con pleno de puntos, al ganar a Paraguay (5-0), Mali (1-0) e Israel (0-1). Seis goles a favor y ninguno en contra hacen a los asiáticos un equipo peligroso, ya que a pesar de que no cuentan con jugadores de renombre, son rápidos, muy técnicos e intensos. El seleccionador japonés, Go Oiwa, suele dibujar un sistema parecido al de Denia, con un doble pivote, tres tíos por delante, y con Mao Hosoya como punta de lanza.

En los anteriores Juegos Olímpicos, con Japón como anfitriona pero sin público debido al covid, la selección en aquel entonces dirigida por Luis de la Fuente venció por la mínima en las semifinales a los de Take Kubo gracias a un gol de Marco Asensio en la prórroga a pase de Mikel Oyarzabal (0-1).