Los romanos, (que eran de buen comer y beber), acuñaron la expresión Mens sana in corpore sano, esa misma frase saltó entre generaciones hasta llegar a la nuestra, y Asics la hizo suya estableciéndola como eslogan principal. Siempre se ha dicho que el deporte es la mejor alternativa a un día nublado y una investigación llevada a cabo por la afamada marca de zapatillas indica que quince minutos y nueve segundos de ejercicio son suficientes para levantar el ánimo.

Para incentivar el deporte ante los momentos de debilidad que puede padecer cada uno, la marca japonesa inició la campaña “15:09”. Cualquier usuario puede grabarse haciendo deporte durante esos quince minutos y nueve segundos que dan nombre al reto y subirlo a las redes sociales bajo el hashtag de #ASICS1509. Además todos los fondos recaudados serán para la asociación Mind, que lleva más de 70 años luchando por la salud mental positiva.

La corredora donostiarra Sarah Ugarte, que tiene varias medias maratones y carreras de montaña a sus espaldas, vio el contexto idóneo para un nuevo reto, ha ido más allá y los minutos los ha convertido en horas, y los segundos, en minutos.

Según Google Maps, de Tolosa a Linza, en el Pirineo oscense, hay un recorrido de quince horas en bici y 45 horas andando, sin contar el tráfico ni los contratiempos que pueden surgir en la carretera. Pero la corredora guipuzcoana, intentará completar la ruta de su casa de Tolosa a los Pirineos en un tiempo récord de quince horas y nueve minutos. Todo con la salud mental por bandera.

El camino no será fácil. La donostiarra partirá mañana de Tolosa a las cinco de la mañana y buscará llegar a Linza a las 20.09 horas. Durante el camino la runner tendrá que enfrentarse a cualquier adversidad y si el reto no fuese lo bastante difícil, coronará dos de las cimas más famosas de Navarra: San Donato y la Mesa de los Tres Reyes, de 1.493 y 2.428 metros de altura. La mejor manera de unir el asfalto y la montaña. La mayor parte de la travesía será en bicicleta, menos las subidas a las cumbres y el último tramo (de la Mesa de los Tres Reyes a la meta en Huesca) lo completará corriendo.

Para la deportista vasca el desafío viene plagado de incógnitas y novedades a partes iguales. Por primera vez emprenderá un viaje de más de 140 kilómetros subida en una bici y al mismo tiempo es su debut en una duatlón, ya que sus especialidades son el trail run y las carreras de montaña.

La preparación tanto mental como deportiva es vital en esta clase de retos y un deportista sabe que una lesión puede echar por la borda el trabajo de meses. Para ello, la corredora de Donostia se entrena así: “La parte física se prepara metiendo kilómetros de bici. La alimentación es fundamental, y sobre todo no lesionarse. En el momento de la carrera las sales y la comida son muy importantes, ya que si te sales del guion o hay una pequeña lesión se va todo al garete”.

La lucha por la salud mental, en ámbitos generales, lleva menos tiempo de lo que pensamos encima de la mesa. En el deporte no iba a ser menos. En los últimos años innumerables deportistas han confesado, que el nivel de exigencia les ha producido un alto cansancio mental e incluso algunos han caído en el pozo de la depresión. Para Sarah Ugarte una salud mental positiva lo es todo, ya que con una cabeza sana es más fácil despertarse para ir a trabajar o llevar a cabo tu actividad favorita.

El reto surgió de la nada. En los kilómetros que hay de los Pirineos a Tolosa hay mucho tiempo para reflexionar. Entonces la runner guipuzcoana pensó que la travesía era óptima para hacerla en bici e incluso podía subir alguna cima emblemática. Todo ello de la mano de Asics, la marca de la cual es embajadora. Si metemos en la coctelera el insaciable hambre de una deportista de élite y el apoyo a una causa social que poco a poco está aflorando en la sociedad, nos queda la gesta que Sarah Ugarte intentará completar mañana 9 de julio.

Un sinfín de preguntas rondan la cabeza de Sarah; ¿será capaz de completar el reto en el tiempo suficiente?, ¿qué problemas se encontrará por el camino?… Una cosa está clara, por ganas no va ser. La donostiarra se siente con fuerza y con la confianza suficiente para un reto de estas características: “Me veo bastante bien de cara al desafío del sábado”. Aunque hay luces y sombras, la exigencia es clave y no habrá tiempo ni siquiera para avituallarse, por lo tanto la cabeza y el cuerpo tendrán que funcionar como si de un reloj suizo se tratase, en perfecto funcionamiento y sin fisuras.

A pesar de que el latín es una lengua extinta, que solo se habla en algunas clases de bachiller y en el Vaticano, las expresiones de los romanos de la época se han mantenido, debido a la gran sabiduría que guardan. Esta no sería una excepción y hay deportistas que la toman como filosofía de vida. No sabemos si de Tolosa a Linza hay quince horas y nueve minutos, ni si el reto finalizará en el tiempo previsto, pero una cosa está clara para Sarah y para todos nosotros, sin mens no hay corpore y sin corpore no hay mens.