donostia - El Parejas es un campeonato muy largo. Eterno. Ese es el dicho anual. Los pelotaris viven altibajos durante los largos meses de competición, con momentos de mucho brillo y otros en los que la pelota nunca conecta con el verde. En este último estado se encuentran Iñaki Artola y Jon Ander Albisu. Los guipuzcoanos arrancaron la competición con cuatro victorias consecutivas y una dinamita en sus brazos que les permitió romper los partidos a base de potencia. Pero ahora están sin chispa. Ayer, en el Ereta de Tafalla, Víctor Esteban y Mikel Beroiz fueron superiores a Artola-Albisu y les complicaron la vida de cara a una clasificación para las semifinales que pareció encaminada y que ahora empieza a estar más en el aire que nunca.

Y eso que las cosas empezaron bien para los azules. Sin hacer excesivos méritos y gracias a los errores de sus oponentes, Artola y Albisu comenzaron mandando por 0-7. Víctor salió desbocado y sus excesivas ganas terminaron por pasarle factura. El riojano, siempre al todo o nada, nunca perdió la cara al partido y pasara lo que pasara lo siguió intentando. Esta estrategia terminaría por serle útil en el tramo final del choque, pero al inicio permitió a sus oponentes marcharse en el marcador. Mientras, Albisu, con una pelota lenta, se sintió cómodo y pudo enseñar la espalda a Beroiz.

El zaguero de Uharte despertó tarde, pero una vez que entró en juego ya no hubo quién le tosiera en los cuadros largos. Beroiz realizó el mejor partido del campeonato y mostró una seguridad abrumadora, siempre colocado en el lugar indicado. A cada pelotazo se sintió mejor sobre la cancha y al colosal trabajo le añadió una dosis de brillo que le permitieron sumar más de un tanto. Además, la suerte también se alió con el navarro y las escapadas realizadas terminaron siendo tanto. Este dominio permitió a Víctor tener más facilidades a la hora de rematar y comenzó a destrozar la defensa azul a base de violentos remates (14-12).

Una vez detrás en el marcador, Artola y Albisu ya no pudieron plantar batalla. Lo intentaron, pero faltó chispa y los colorados, con el viento a favor después de haber logrado igualar el encuentro, entraron en una fase en la que todo les salió. Así, Víctor y Beroiz terminaron por romper el partido y se lanzaron directos hasta el cartón 22, dejando a sus rivales en 15 y viendo como se les complica la clasificación.