donostia. La Liga San Miguel tiene ya, si no ocurre una hecatombe, a su digno vencedor: Kaiku. La Bizkaitarra se alzó ayer con la victoria final de la XXXVI. Ikurriña de Zarautz, a pesar de perder el triunfo de la segunda jornada en la última palada, en beneficio de Urdaibai. Los de Sestao ya pueden empezar, por tanto, a hacer sitio a la Corona la Caixa -se lo quedarían en propiedad por ser su tercer título consecutivo- en las vitrinas del club de la margen izquierda vizcaina.
La cara gris de la doble jornada la puso Orio, que con un tercer y cuarto puesto, respectivamente, se despide prácticamente del liderato, y ve acercarse a Urdaibai en la lucha por el segundo lugar de la tabla. Tan solo un punto separan ahora a aguiluchos y txos y, por tanto, no se deben descuidar los de Igor Makazaga, si quieren mantener esa plata que ha ostentado durante toda la temporada. A pesar de ello, ayer quedó claro que el bote oriotarra se está perfilando para la clasificatoria de La Concha, y vista las nulas posibilidades de imponerse en la competición, en las tostas amarillas se empiezan a probar qué remeros y en qué posiciones van a concurrir los trece del día 29.
Los de José Luis Korta fueron a romper la regata desde el principio. Pusieron un ritmo alto en la tanda de honor, pero no consiguieron sacar más de cinco segundos en la primera ciaboga a las tres embarcaciones que la perseguían: Hondarribia, Orio y Urdaibai. La Ama Guadalupekoa volvió a tener un gran inicio, manteniéndose, sin dificultades, a la altura de los tres gallos. En la maniobra de vuelta a puerto, la Bou Bizkaia comenzaba a enseñar sus buenas sensaciones en popare. Consiguió separar a Hondarribia y Orio a una trainera, y se acercaba a menos de tres segundos de la proa de la tanda.
La perla negra parecía volver a tener competencia, pero, como acostumbra, los sestaoarras fueron intratables en brancas, donde demostraron que son muy superiores al resto. La regata se volvió a resquebrajar por delante, pero, en la popa de la tanda, las dos embarcaciones guipuzcoanas seguían inmersas en una batalla particular muy vistosa. Hondarribia enfilaba primero la última baliza, pero con menos de un segundo de ventaja sobre la embarcación oriotarra.
Y con esta emoción se llegó a la última txanpa. La serie estaba haciendo justicia a la espectacularidad del remo de la Liga San Miguel, pero todavía quedaba por ver la guinda del pastel en Zarautz. Mientras amarillos y verdes volvían loco al GPS, turnándose el tercer puesto a cada remada, por delante se empezaba a atisbar un posible vuelco final en la lucha por la victoria de la jornada. Kaiku parecía tener todo controlado cuando inició el cuarto largo con una ventaja de cinco segundos, pero Urdaibai se gustó, otra vez en popare, y los de Jon Salsamendi fueron recortando centésimas con cada remada.
A cien metros de la llegada, la Bou Bizkaia tenía a un segundo la victoria, y parecía que se volvería a quedar con la miel en los labios, como le ha pasado en otras ocasiones. Pero, esta vez, la diosa fortuna sí estuvó del lado del bote azul, que cruzó en primer lugar la línea de meta, con tan solo dos centésimas de ventaja sobre la tripulación líder.
Consiguiendo ser protagonista de la victoria con menor diferencia en la historia de la Liga ACT, Urdaibai volvió a ganar. Por fin, dirán en Bermeo. Desde Barcelona, en la jornada inaugural, los bermeotarras no se imponían en una regata, pero el triunfo de ayer tendrá un sabor agridulce en sus tostas. Los de Jon Salsamendi ganaron y se echan encima del subcampeonato, pero los seis segundos que le insufló Kaiku el sábado le impidieron levantar la Ikurriña. De todas formas, la imagen dada por los txos no deja dudas de que han llegado en un gran momento de forma a la parte final de la temporada. Hondarribia es la otra trainera que sale más reforzada de Zarautz. Los bidasotarras iniciaron un poco justos la Liga, pero han sabido dosificar sus fuerzas para llegar a las regatas más importantes del verano en su mejor forma. Ayer se le escapó el segundo puesto del sábado, en beneficio de Urdaibai, pero, hoy por hoy, da la sensación de que las cuatro de la tanda de honor tendrán plaza fija en La Concha.
mucha competencia En la tanda media, la competencia entre las tripulaciones, lejos de bajar, sube. Ayer, Astillero, que consiguió entrar en la serie tras quedar mejor que Tirán el sábado, ofreció una auténtica exhibición. Los de la reciclada San José XII salieron con el cuchillo entre los dientes. Los cántabros no esperaron a nadie, y se adjudicaron la segunda serie con un sorprendente dominio. Se fue desde el inicio, y venció con dos traineras de ventaja. Por detrás, se vivió una bonita pugna entre las dos embarcaciones santas pasaitarras. San Juan superó a San Pedro en meta por tres segundos, y vuelve a acercarse a la Libia en la tabla. Portugalete fue la más floja de la segunda serie. Queda claro, por tanto, que este año el séptimo billete de la bandera donostiarra va a estar más caro que nunca.
zumaia hace los deberes La Telmo Deun ya puede respirar tranquila. Tras tener una trayectoria irregular durante toda la campaña, Zumaia ha conseguido enlazar dos grandes regatas que le consolidan, a falta de dos jornadas, en la undécima plaza. Los de Santi Zabaleta vencieron con autoridad a Castro, que ya llegaba ayer tocada tras la jornada del sábado, y se aseguran disputar el play-off por la permanencia, evitando así el descenso directo. La victoria de la tanda fue para una floja Tirán, que se descuelga de la lucha por la tanda de honor, por delante de
Pedreña.