Un total de 158.194 espectadores asistieron a las más de 600 proyecciones que ofreció último Festival de Cine de San Sebastián de 238 películas, procedentes de 58 países.

El dato de espectadores, que supone un aumento de entorno a 5.400 personas respecto al público que vio los filmes en 2022, es uno de los que destacan de la memoria de actividad de este ejercicio que ha difundido este viernes el Zinemaldia.

Otra cifra que "certifica la vitalidad de la industria del cine, el activo de la presencialidad en las citas y el posicionamiento del Festival", señala la dirección en un comunicado, es que por primera vez ha superado las 5.000 personas acreditadas, casi un 10 % más que el año pasado, que ya fue récord para el certamen, y un 78 % más desde 2010.

Destaca que a la senda de crecimiento, que comenzó hace doce años con la creación del Foro de Coproducción Europa-América Latina, han contribuido en 2023 propuestas como la segunda edición de 'Spanish Screenings: Financing & Tech' y las redes con nuevos talentos, cineastas, programadores y profesionales de la industria que está estableciendo Z365.

El Festival de todo el año, que en 2023 ha celebrado por primera vez las iniciativas 'Kabia' y '2deo Topagunea' han sido otras de las acciones que han propiciado la subida de datos.

El informe recoge asimismo detalles de las conversaciones, clases magistrales y mesas redondas de la edición, así como de "la consolidación" del programa 'Ikusmira Berriak' con la Concha de Oro del jurado presidido por Claire Denis a 'O Corno/The Rye Horn' de Jaione Camborda.

Es la cuarta edición consecutiva en la que una película dirigida por una mujer gana el premio mayor de la Sección Oficial y la primera vez que se concede a una cineasta española.

La polémica generada por la programación de la película "No me llame Ternera" y la exigencia de retirada por parte de algunos sectores políticos, aparece mencionada también en la introducción de la memoria 2023, que recalca que el Zinemaldia "no vaciló" en que el filme sobre la entrevista de Jordi Évole al exdirigente de ETA José Antonio Urritikoetxea debía "ser visto primero y sometido a crítica después, y no al revés".

"El Festival se reafirma en la defensa de la libertad de expresión y también en la convicción sobre la capacidad transformadora del cine", zanja el certamen.