ARCO, la Feria Internacional de Arte Contemporáneo de Madrid, abre desde hoy sus puertas hasta el domingo con el objetivo de recuperar la normalidad tras la pandemia. Con las ganas de conocer esa normalidad, tras la experiencia debut de la edición reducida del pasado curso, regresa a ella Cibrián Gallery, invitada por el programa Opening y única galería guipuzcoana representada en el evento. No obstante, no se trata del único espacio donostiarra que estará durante esta semana en la capital madrileña, ya que Kur participa en Art Madrid, una de las ferias alternativas que surgen durante estos días al amparo de ARCO.

"Vamos con expectativas muy optimistas. La edición del año pasado se celebró en julio, con mucho calor y menos gente. Ahora la feria vuelve a su fecha original y sin casi restricciones", cuenta Gregorio Cibrián. La galería donostiarra vuelve a Arco por segundo año consecutivo gracias a la invitación recibida por el programa Opening y lo hace con dos exposiciones de las artistas Susan Cianciolo y Esther Gatón. "Es una oportunidad para darnos a conocer y refrescar contactos. Es una experiencia perfecta y confiamos en que este año acuda mucho más público internacional", explica.

Para poder participar en la sección general de Arco, lo normal es que "pasen varios años" hasta poder conseguirlo, algo que esta galería, de tan solo tres años de vida, ha sorteado gracias a la invitación que emiten dos comisarios de ARCO. "Nos sirve, sobre todo, para entender el funcionamiento de la feria antes de dar el salto propio", revela Cibrián, encantado de representar a Gipuzkoa en el evento. "Gracias a nuestra tradición cultural, el público y el resto de galerías han recibido con alegría que Gipuzkoa vuelva a estar representada en Madrid. Nosotros asumimos el papel encantados y se nos hace la boca grande porque creemos que hacemos una muy buena representación de Donostia", añade.

Para ello, la galería ha optado por repetir con la autora Esther Gastón, que tuvo una excelente acogida el pasado año y de la que, en esta ocasión, mostrará cuatro piezas relacionadas con su investigación con materiales bioplásticos. "Es una artista joven de la que creemos que la selección, que podría ser una colección, es una excelente presentación que, además, está relacionada entre sí", indican desde el espacio.

A ella se suma la última artista incorporada a la familia Cibrián, la neoyorquina Susan Cianciolo, ya reconocida en Estados Unidos por un trabajo que combina arte contemporáneo y moda y que presentarán por primera vez en Madrid antes de hacerlo en su sede de Donostia.

"El objetivo es seguir aprendiendo y no perderse una cita que no se puede perder como es la de ARCO", apunta Cibrián, con la mirada también puesta en futuras ediciones a las que confían poder seguir acudiendo.

Art Madrid

Galería Kur

Aunque la representación guipuzcoana en Arco está limitada estos días a Cibrián Gallery, en una de las numerosas ferias alternativas que se llevan a cabo a la par en la ciudad madrileña también tiene sitio otro espacio de Donostia. La galería Kur acude por cuarta vez a Art Madrid, "una feria interesante de formato más pequeño" en el que solo tienen cabida artistas que siguen en activo.

"Acudimos muy ilusionados. Creemos que puede ser un buen año tras el covid porque otras ferias han funcionado bien antes", indica Juanma Arriaga, de una galería que buscará, por lo menos, "cubrir los gastos". Para ello, contará con artistas vascos, algo que siempre gusta en Madrid: "A mucha gente le interesa la tradición que tenemos con el hierro y la piedra. Además, hay mucho vasco asentado en Madrid que se acerca interesado".

Para su cuarta vez en Art Madrid, Kur expondrá el trabajo de un pintor, Luis Olaso, y tres escultores muy diferentes entre sí: Fernando Mikelarena y sus esculturas de hierro y alabastro, Iñigo Arregi y sus collages y Aitor Etxeberria y sus composiciones con material reciclado.

Kur es la única representante de Euskadi en una feria que, aunque "no tiene nada que ver en tamaño y formato con ARCO", es una excelente oportunidad para darse a conocer. "El coleccionista que viene a Madrid se hace un recorrido muy interesante por todas las ferias al amparo de Arco", explica Arriaga, confiado en que, tras dos años complicados por la pandemia, el público vuelva a querer invertir en cultura.