¿Les suena esa sensación que se produce cuando suena una buena música, se mete por las entrañas, hace palpitar el corazón y produce una alegría y unas ganas de bailar imposibles de ignorar? Sí, seguro que sí. Hablo de esa música que, aunque hace un rato que haya terminado, se queda en nuestro imaginario, volviendo una y otra vez con sus estribillos y produciéndonos de nuevo esas ganas de bailar. Bien, pues esa sensación, y no otra, es la que produce Goxua'n Salsa, la primera orquesta profesional de salsa formada en Pamplona.

Catorce músicos provenientes de diferentes formaciones componen esta orquesta, creada en enero de 2020, que recientemente ha saltado a los escenarios y ya cuenta con un público fiel. Por el momento, su repertorio se compone de versiones de canciones como La Cura, de Frankie Ruiz; Lágrimas, de Roberto Blades; Llorarás, de Oscar D'Leon; o La CuraLágrimasLlorarásAna Milé,. Hasta aquí, nada nuevo: un grupo de salsa tocando canciones de salsa. Lo novedoso viene cuando, en medio del concierto y sin que nadie se lo espere, los vocalistas Danny Valencia, Carlos Mario Valencia y Robinson Quintero, acompañados por las secciones de vientos y percusión, arrancan a cantar: "Mundua ikusi nahi dut / baina zure ohetik / Mundua ikusi nahi dut". ¿Les suena?

Es el inicio de Bueltatzen, mítica canción de Berri Txarrak, a la que el director de la orquesta, Julen Leuza, ha realizado unos arreglos. Esta y otras canciones, como Malkozko irria, de Gozategi, y Lorak eskeintzen, de Gatibu, se transforman en algo nunca visto hasta ahora: una canción de salsa, con ritmos propios de este estilo, en euskera. Y es que esta es una de las señas de identidad de este conjunto con la que pretenden marcar su camino. "Durante el confinamiento, con todo parado y con ganas de que este proyecto no cayese en el olvido, se nos ocurrió que podíamos hacer algo que no se había hecho hasta el momento: salsa en euskera", cuenta el director de la orquesta, Julen Leuza, quien resalta la buena acogida que están teniendo estos arreglos musicales entre el público. "Cuando contemos con nuestras propias canciones, no dejaremos de lado esta idea y crearemos temas tanto en castellano como en euskera, siempre con los ritmos de la salsa como bandera", añade Leuza, quien también toca la trompeta y las maracas.

La aventura de Goxua'n Salsa comenzó en enero de 2020. Antes, algunos de los componentes de esta orquesta habían coincidido en una agrupación que daba sus primeros pasos en el mundo de la salsa, pero cuyo proyecto finalizó. "Para algunos, esta fue nuestra primera incursión en este estilo, muy diferente a todo lo que habíamos hecho hasta el momento", recalca Ion Osés, trompetista de la orquesta. Otros en cambio, como David Lotero (percusión) y Christian Hernández (congas), llevaban más de diez años participando en diferentes eventos de salsa. Allí conocieron a Carlos Mario Valencia, uno de los vocalistas, quien con su hermano Danny había actuado en diversas ocasiones en Colombia, su país de origen.

Dispuestos a crear una orquesta profesional de salsa, la primera en Pamplona, algunos de los músicos que habían coincidido en la agrupación comenzaron a dibujar las líneas de este nuevo proyecto a principios de 2020. "Empezamos a ensayar y nos gustaba mucho lo que escuchábamos, así que decidimos ofrecer un primer concierto el 20 de marzo de 2020", dice Leuza. Entonces, a pocos días de su presentación como Goxua'n Salsa, llegó el confinamiento. "Se truncaron todos nuestros planes, pero en vez de dejar todo este trabajo de lado decidimos seguir ensayando, por nuestra cuenta y, cuando se pudo, todos juntos, y desde entonces no hemos parado", comenta Osés.

Así, poco a poco, Goxua'n Salsa fue tomando la forma que ahora presenta, con un variado repertorio que incluye salsa, boleros y, en breve, chachachá. "Nosotros ?los vocalistas? llevamos la salsa en la sangre porque venimos de la capital de la salsa, y queremos impregnar de este estilo, al menos un poquito, la ciudad", agrega Valencia, quien en el escenario presenta una coreografía perfectamente coordinada junto con su hermano y Quintero. "Aunque parezca ensayado, nos sale natural; es lo que tiene llevar la salsa en vena", dice.

Ahora, después de un año lleno de ensayos en el local que tienen alquilado en el municipio navarro de Iza, presentan un repertorio compuesto por unas 12 canciones variadas que ya han mostrado en sus conciertos de la Sala Tótem, Esquíroz y Tudela. Para el de este viernes, prometen diversión y dos colaboraciones con las que pretenden sorprender a ese público fiel que les sigue de escenario en escenario, pero también al nuevo, que esperan que se enganche a la magia de la salsa. "Que nadie se preocupe si no conoce el repertorio, porque las canciones son tan bonitas y pegadizas que una vez las escuchen en el concierto, no las olvidarán", advierte Valencia, para quien eso de cantar en euskera resultó "todo un reto" que han superado con solvencia. En el caso de los músicos, "¿el mayor reto? Bailar", bromea Osés. ¿Lo habrán superado?