Donostia - La banda británica Crystal Fighters convertirá este lunes el Velódromo de Anoeta en una gigantesca pista de baile donde defenderá su condición de icono de la música indie más festiva. Antes de su actuación, El Guincho protagonizará un prólogo igualmente animado cuyo comienzo está previsto a las 20.00 horas. Aún quedan entradas disponibles en ticketmaster.es al precio de 33,5 euros.
En 2010 Crystal Fighters comenzaron a subir como la espuma gracias a los singles Xtatic Truth y I Love London. “Costó encontrar una etiqueta para definirlos: ¿lo-fi tropical electro, electro-folk, folktrónica? Se aceptaron las tres y alguna otra. Su mezcla de géneros no solo llamó la atención por peculiar, sino porque la fueron sirviendo en directo con un extra de euforia y pasión. Remitiendo al house ibicenco, rozando el drum’n’bass y soltando adrenalina (ellos y el público) con la txalaparta incrustada en su lluvia de ritmos”, recuerdan los organizadores del concierto.
Su primer álbum, Star Of Love (2010), quedó muy bien situado en las listas británicas de música dance e indie. Cave Rave (2013), su segundo trabajo, fue gestado en Euskal Herria, que fue parte integral de los sonidos que inspiraron su primer disco. Si este estaba “más orientado hacia una suerte de techno orgánico, ancestral y tribal, entre psicodélico y folklórico”, el nuevo material ponía “énfasis en una suerte de pop electrónico y macrofestivo”. “Su público se multiplicó en progresión geométrica, así como su popularidad”, recuerdan.
Hace solo un mes que vio la luz Everything Is My Family (2016), el disco que les trae a Donostia en una cita que comenzará con el concierto de El Guincho. El intérprete canario, una de las figuras referenciales del pop bailable en el Estado, presentará su nuevo trabajo, HiperAsia, definido como “un proyecto audaz para un público en llamas”. - N.G.