Azkarate - Mientras el técnico Jonan Ordorika da los últimos toques al máster de Paradoja, Berrio no puede ocultar una sonrisa de satisfacción al hablar de su nuevo y joven grupo. A su tocayo Rafa Rueda lo define como un guitarrista “métodico y con muchos recursos”, y de su colega Joseba Baleztena (Joseba B. Lenoir) destaca “el desparpajo, la audacia de la juventud y una insolencia casi punk”. El pluriempleado Félix Buff (Willis Drummond) le parece “el mejor batería en muchos kilómetros a la redonda”, un “hombre de estado con la globalidad del proyecto en la cabeza”. “De hecho, ha dirigido los ensayos”, asegura antes de citar al “talentoso” bajista Fernando Lutxo Neira, habitual en la banda de Ruper Ordorika y que comparte con Berrio el papel de coproductor de este álbum.

“El reto de la grabación ha sido conservar la energía del directo”, dice Neira, que también destaca la sintonía que ha habido entre un equipo que nunca había coincidido salvo en el caso de Buff y Baleztena. Tras ensayar en el local del cantante donostiarra, se encerraron cinco días en el estudio de Ordorika en Azkarate -entre Nochebuena y Nochevieja de 2014- y grabaron el disco “sin cortapegas”, con “un concepto muy de directo”. Berrio aclara que “no hubo vuelcos ni cambios” en las melodías y estructuras de sus canciones, pero dio libertad a los jóvenes para crear los arreglos que han proporcionado energía y frescura a la base sonora, con Petti colaborando en los coros.

Semanas después, el músico bajó a Madrid para meter las voces en el estudio de José María Rosillo, que ha grabado a artistas como Jorge Drexler, Cooper, Duncan Dhu o Christina Rosenvinge. Dice Berrio que le gusta cantar en Madrid: “Adoro caminar por sus calles. En la gran ciudad, me siento más importante, más estrella”. Más en serio, confiesa que Rosillo “conoce muy bien” su voz y por eso prefiere trabajar con él. En Paradoja, además, ha vuelto a cantar con energía rockera para hacerse escuchar entre el estruendo guitarrero. Lógicamente, sus cuerdas vocales no son las de hace 30 años y ya no llega a los tonos de cuando estaba en Amor a Traición: “Pero quiero creer que cuando envejeces tu voz se va haciendo más interesante”.

portada y vídeo Pero la lujosa alineación de Paradoja no termina en lo estrictamente musical. La portada es un diseño de Txeli Lanzagorta sobre una ilustración del artista Detritus, que estos días expone en el Koldo Mitxelena. El 7 de abril, once días antes del lanzamiento del disco, se publicará el videoclip del single Mis ayeres muertos, registrado por el realizador Angel Aldarondo en el Teatro Principal de Donostia. - J.G.A.