la reina de las redes, el indiscutible trending topic mundial de ayer fue la actriz y antes modelo Uma Thurman, que dejó perplejos a los asistentes a la premiere de la miniserie The Slap, de NBC, en la que participa y que se estrena mañana mismo. Claro que en esta ficción tendrá otro aspecto, el de siempre. Ahora hay quienes aseguran que “no es ella, es una doble. A la real la han matado, lo mismo hicieron con la Zellweger”, otros son más tajantes “Yo creo que debería sacar el sable de Kill Bill y ajustar cuentas con el cirujano”. Las comparaciones más cercanas tampoco faltaron: “Parece mucho mayor que antes. Pero mucho mayor. Parece una especie de Carmen Lomana, plastificada y sin expresión. En 3, 2, 1... tiene a Monedero detrás”. El sentir general es: “¡Qué horror! Deberían ir al psicólogo más que al cirujano”.

La protagonista de Amistades peligrosas, Gattaca, Pulp Fiction o Kill Bill parecía una mujer sensata y, sin duda, guapa, no en vano su nombre en sánscrito es el de la diosa hindú de la luz y la belleza. Hija de un profesor budista de la Universidad de Columbia, de pequeña pasó largas temporadas en India junto a su familia y recibieron visitas del propio Dalai Lama. Tal vez el origen de este ¿cambio? sea que a los diez años, una amiga de su madre sugirió hacerle una rinoplastia, algo que la mortificó durante años. Fue uno de los incidentes que la llevaron a sufrir dismorfobia, un desorden mental que implica una imagen distorsionada del cuerpo, algo sobre lo que ella habló en una entrevista con la revista Talk en 2001. Ahora, a los 44, ha dado un paso que se veía venir. Como comentaban ayer algunos internautas, “son incapaces de asumir que la vejez es un proceso natural imposible de detener. Más de una debería tomar como modelo a Julianne Moore. 55 sensacionales añazos, sin signo alguno de cirugía”, aunque otros se dejaban de explicaciones psicológicas: “Me recuerda a uno de los Caraconos”, afirmaban.

De 2003 a 2010, la FX estadounidense emitió una serie con dos cirujanos plásticos de Miami como protagonistas (entre nosotros pudo verse en ETB). Los sectores más conservadores del país la machacaron por abordar temas como incesto, homosexualidad, bisexualidad, aborto, pedofilia, adicción a las drogas y sectas religiosas pero esta ficción creada por Ryan Murphy rompió moldes siempre con la pregunta inicial de los médicos a los pacientes: “¿Qué parte de su cuerpo no le gusta?”.

Courteney Cox, Melanie Griffith, Nicole Kidman, Mary-Kate Olsen y la última y más sonada, Renée Zellweger, han pasado por lo mismo. Y las reinas de la cirugía, Cher y Donatella Versace. Pero no solo hay mujeres: desde Michael Jackson a Robert Redford, desde Stallone a Rourke, de Ashton Kutcher a Rob Lowe. “Todos deseamos llegar a viejos, y todos negamos que hayamos llegado”. Lo escribió Quevedo.