Estimada directora:
Creo que el artículo titulado El teólogo Joxe Arregi, muy crítico con Munilla, deja el sacerdocio franciscano, publicado por NOTICIAS DE GIPUZKOA el miércoles 1 de septiembre se merece una reflexión.
La expresión "deja el sacerdocio franciscano" es inadecuada. No hay diversos sacerdocios, sino uno solo independientemente de la pertenencia del sacerdote al clero diocesano o a algún instituto religioso.
En el primer párrafo se dice: "Y dejar la vida espiritual". No sé qué querrá decir el periodista con esta afirmación. Pero es absolutamente inaplicable al caso Joxe Arregi.
A continuación, se añade que "Arregi decide dejar el sacerdocio". No es cierto. Seguirá siendo y considerándose sacerdote.
En el segundo párrafo leemos: "Los motivos de su renuncia como hermano". ¿Qué quiere decir el periodista con ese término "como hermano"? ¿Querrá decir, pienso yo, "como religioso franciscano"?
En el tercer párrafo hay dos errores. Se dice: "Pocos días después de que Munilla tomase el bastón de mando... el prelado emérito del territorio, Juan María Uriarte, le pidiera silencio". Siendo obispo Munilla difícilmente podía seguir interviniendo Monseñor Uriarte en la diócesis. Pero además no fue Uriarte quien le pidió silencio a Joxe Arregi sino sus propios superiores franciscanos.
Este artículo me permite constatar una vez más la existencia de ciertas deficiencias en algunos medios en la información religiosa, y la necesidad de contar con periodistas expertos o buenos conocedores del hecho religioso.
Atentamente,