El Bidasoa Irun ha superado al Atlético Valladolid en un partido que ha controlado desde el momento en el que a partir del cuarto de hora de juego ha encontrado un mejor tono defensivo (32-27).

Sin defensas ni porterías por ninguna de las dos partes en el arranque, solo los errores propios en pase o lanzamiento evitaban que tanto los de Álex Mozas como los de David Pisonero, que ha optado por retirar a Bar por Forns en el minuto 13, no completaran un 100% de eficacia ofensiva.

Cuando el equipo guipuzcoano ha acertado a llevar a su rival al pasivo y evitar que marcara contragoles fáciles, lo que ha conseguido en cuatro ocasiones en la primera mitad, ha cortado de raíz la hemorragia de goles en contra y ha visto aparecer a su portero, Leo Maciel, que fiel a su costumbre cuando desbarata acciones de siete metros, ha neutralizado a pares.

Si la proyección del empate del minuto 15 hacía presagiar que el descanso podía decretarse con una igualada a 22 tantos, durante los segundos quince minutos del choque al Atlético Valladolid, sin Camino ni D’Antino, le ha costado un mundo marcar: dos goles para el 16-13, con cinco paradas de Maciel.

Si se le suma el remedio a uno de los principales problemas de Pamplona, la incapacidad de convertir en goles las recuperaciones, era cuestión de lógica que los parciales cayeran del lado amarillo.

6

Lluvia solidaria de peluches en el Bidasoa-Atlético Valladolid de Artaleku Iker Azurmendi

El gato al agua

La segunda mitad ha arrancado con una suerte de duelo realizador entre un estelar Asier Nieto y Gustavo Oliveira que se ha en el momento en el que el equipo visitante ha cometido dos faltas en ataque traducidas en sendos goles de Tao Gey y el propio lateral vizcaino para fijar el 21-16 (min. 37).

A la vuelta del tiempo muerto visitante, un páramo: ambos equipos han necesitado de entre seis y siete minutos cada uno para volver a anotar.

Una parada de Maciel que ha aprovechado Furundarena a la contra y una recuperación de Gorka Nieto para un posterior gol liberador de Mujika (23-17), que ha establecido la máxima renta del choque y han llevado a Pisonero a llamar de nuevo a los suyos al banquillo (min. 45).

La pausa ha resultado con un parcial de 1-4, con una variante de 5:1 en la defensa vallisoletana, que ha podido hacer creer que en la recta final del choque este se podría complicar para los intereses locales, sin los lesionados Francisco da Silva, Boskos y Díaz. Nada más lejos de la realidad: tiempo muerto local (min. 49, 24-21) y otras cuatro paradas de Maciel más acierto ofensivo total, con combinaciones de los hermanos Salinas para hacer disfrutar a los presentes, han dejado en casa un choque en el que ha debutado con gol el urruñarra Alexander Raix.

Tras el triunfo contra el equipo vallisoletano, el tercero consecutivo en Liga por primera vez en lo que va de temporada, el equipo guipuzcoano viajará este martes a Logroño (20:00 horas) y recibirá al Puente Genil el sábado en Irun (19:00 horas) para terminar la primera vuelta.

Ficha técnica

32 - Bidasoa Irun (16+16). Maciel, Cavero (4 p.), Rodrigo Salinas (3), Gorka Nieto (5, 2 p.), Asier Nieto (9), García (1), Esteban Salinas (3); Skrzyniarz, Jevtic (2), Zabala, Gey-Emparan (1), Furundarena (1), Mujika (1), Raix (1), Asier Iribar, Pacheco (1).

27 - Recoletas Atlético Valladolid (13+14). Bar, García, De Toledo (2), Ribeiro, Abdelazize (2), Oliveira (7), Dimitrioski (1); Forns, De Fuentes (1), Karapalevski, Pisonero (4), Álvaro Martínez (2), Miguel Martínez (4), Pedro Martínez, Calle (3), Herrero (1).  


Parciales. 2-2, 6-7, 11-10, 14-11, 15-12, 16-13; 18-15, 21-16, 22-17, 25-21, 28-24, 32-27.

Árbitros. Raúl Oyarzun Aylagas y Aritz Zaragüeta Ruiz. Por parte del Bidasoa Irun, excluyeron a Jevtic (15’16, 28’14), Mujika (18’38) y García (32’02). Por parte del conjunto vallisoletano, a Abdelazize (11’24, 33’35), García (17’51) y Ribeiro (25’01).

Incidencias. Unos 1.600 espectadores en Artaleku en el choque correspondiente a la 13ª jornada. Antes del partido, el Bidasoa presentó su nuevo patrocinador, Naturklima; mientras que en el descanso hubo una lluvia solidaria de peluches, acción acompañada a la campaña con Cruz Roja Gipuzkoa de recogida de juguetes educativos.