La selección estatal dio un nuevo paso hacia los cuartos de final del Mundial de Dinamarca, Noruega y Suecia, la llave que abre la puerta a los torneos preolímpicos, al imponerse ayer por 30-23 a Argentina. Y lo hizo gracias en buena parte al gran partido de la lezoarra Maitane Etxeberria, autora de siete tantos. Por parte argentina también sobresalió otra jugadora del Super Amara Bera Bera, Shula Gavilán, máxima anotadora del encuentro con ocho goles, y también jugaron Elke Karsten (3, 2p) y Malena Cavo (2).

Eso sí, las Guerreras sufrieron más de lo que reflejó el marcador final, sobre todo en la primera mitad, en la que las de Ambros Martín, irreconocibles en defensa, se marcharon al descanso por detrás en el marcador (12-13). Un inquietante panorama que cambió por completó en una segunda mitad en la que España mostró la solidez defensiva de la que careció antes del descanso.

El conjunto español pareció arrancar la contienda excesivamente relajado, sobre todo en defensa, donde la pivote Gavilán hizo estragos y donde se perdieron muchos rebotes.

Una falta de consistencia defensiva que impidió a las Guerreras sacar a relucir su veloz juego de contragolpe. Además, la portera argentina Marisol Carratú estuvo acertada.

Sólo la gran actuación de la portera Merche Castellanos, ex del Bera Bera, pareció aliviar las dificultades del equipo español, que tuvo que dar por bueno el 12-13 del descanso.

Pero en la segunda mitad todo cambió: España logró dotar a su defensa de contundencia para cerrar todos los caminos al gol al conjunto argentino, que sólo marcó un gol en los primeros ocho minutos del segundo período. Y, además, las Guerreras pudieron, por fin, empezar a correr a la contra.

Sin embargo, la falta de efectividad en lanzamientos claros, que siguió engordando los números de la portera Marisol Carratú, impidió a romper definitivamente la contienda.

Un despegue definitivo que no llegó hasta mediada la segunda mitad, cuando las Guerreras parecieron ajustar el punto de mira con dos contraataques consecutivos de Alicia Fernández y Maitane Etxeberria, para situarse con una renta de cuatro tantos en el marcador (20-16).

Pero ni así pudo relajarse el conjunto español, que siguió alternando goles con fallos en lanzamientos claros desde la línea de los seis metros, de los que sólo se libraron Sole López y una Paulina Pérez que no deja de crecer en cada partido.

Precisamente un tanto de la ibicenca permitió a España ponerse a poco más de ocho minutos para la conclusión con una máxima renta de seis goles que permitió respirar a las Guerreras y sumar un triunfo (30-23) que le acerca a los cuartos de final y a los ansiados torneos preolímpicos.

Una victoria mañana ante la República Checa supondría garantizarse la presencia en cuartos.