- El Departamento foral de Medio Ambiente y Obras Hidráulicas presentó ayer el Plan de Permeabilización de Obstáculos de Gipuzkoa para el periodo de 2020 a 2035, que prevé la eliminación de 228 trabas fluviales para poder recuperar la navegabilidad de más de 450 kilómetros de los ríos del territorio. La inversión prevista es de 8,5 millones de euros y se realizará en tres fases.

El plan tiene el objetivo de eliminar todas las trabas encontradas en los ríos, mejorar su conectividad longitudinal y lograr un beneficio ecológico. Para ello, actuará ante 228 obstaculos de las cuencas y afluentes de los ríos Bidasoa, Oiartzun, Urumea, Oria, Urola y Deba.

Entre todos los obstáculos identificados, 114 se sitúan en la cuenca del Oria, 39 pertenecen a la del Urola, 38 se encuentran en la del Deba, 21 en la del Oiartzun, doce en la del Urumea y cuatro en la cuenca del Bidasoa. Además, la mitad del total de los obstáculos (116) se consideran intransitables, 51 tienen una transibitalidad moderada y 61 son transitables.

En los ríos guipuzcoanos hay inventariados 784 obstáculos: 112, han sido permeabilizados, 45 son de impacto mínimo y 399 se quedan fuera del plan debido a los tramos en los que se encuentran. El Departamento de Medio Ambiente y Obras Hidráulicas prevé que se pase de los 193 kilómetros accesibles a los 616 en 2035.