La Asociación de familias de menores oncológicos de Gipuzkoa, Aspanogi, volvió a evidenciar ayer que la solidaridad es una característica consustancial al territorio, congregando en la Marcha Nórdica que organiza con motivo del Día Internacional del Niño con Cáncer a más participantes que el año anterior.

El tiempo, pese al viento bravo y a las olas que provocaron algún susto al paso de la comitiva por el Paseo Nuevo, no pudo poner más de su parte en la causa de dar visibilidad al cáncer infantil.

Bastante antes de las 11.00, hora de inicio de la marcha, un nutrido grupo de personas se congregaba en la explanada de Sagues. Con tiempo suficiente para calentar y sacarse fotografías con todo aquel que se las demandaran llegaron al punto de encuentro los personajes de la Legión 501 de Stars Wars y Porrotx, repartiendo alegría entre los más pequeños.

Con pañuelos piratas multicolores como señal identificativa y ganas de sumar apoyos para avanzar en una lucha dura y sin tregua, en torno a 800 personas recorrieron toda la línea de costa con algún que otro sobresalto en forma de ola, chapuzones que ayer molestaban menos por las altas temperaturas impropias de un mes de febrero.

Maite Peña, diputada foral de Políticas Sociales, y la concejala de Acción Social del Ayuntamiento de Donostia, Aitziber San Roman, son fieles a esta cita y con su presencia pretenden agradecer el esfuerzo que realiza Aspanogi para apoyar a las familias de los menores oncológicos.

Peña quiso poner en valor la impagable tarea de Aspanogi, asociación con la que Diputación tiene suscrito un convenio de colaboración. "El trabajo en común es la vía para seguir adelante. El trabajo que hacen a lo largo del año es excelente, aunque hoy es el día en el que resulta más visible", afirmó.

"En Gipuzkoa tenemos un modelo propio para desarrollar las políticas sociales que pasa por la colaboración. Es un modelo enriquecedor y que funciona", apuntó Peña, que destacó la forma de responder de Aspanogi a la hora de apoyar a las familias "cuando reciben una de las peores noticias posibles".

Aitziber San Roman tiene claro que seguirá respondiendo al llamamiento de Aspanogi siempre que pueda. "Hay que estar junto a quienes trabajan por los demás. Lo que se ve hoy aquí no tiene precio, aunque Aspanogi hace muchas cosas a lo largo del año. Lo más importante es el apoyo y la esperanza que transmite a quienes están pasando por un momento tan duro, y siempre desde la más absoluta generosidad, incluso cuando ellos ya han superado ese momento", incidió San Roman.

A la cita de Sagues no quiso, tampoco faltar, acompañando a su séquito de darth vader de la Legión 501, Andoni Serrano, una de las personas que trajo la iniciativa a Gipuzkoa y que ha contribuido a crear la fundación "pink force para llevar esta fuerza y alegría a los hospitales". "Queremos que la fuerza de Stars Wars atraiga a la gente para apoyar esta causa" a la que a nivel mundial estos personajes llevan sumando energía hace 20 años, cerca de seis años en Euskadi.

Entre los cientos de personas que acudieron ayer a la marcha se hallaba una importante cuadrilla de alumnos y alumnas, padres y madres de la ikastola Herri Ametsa. Oihana Latasa e Iban Orbegozo, junto a sus hijos Amets, Uxue y Oinatz, se sumaron a este llamamiento.

"Hay un niño en la ikastola que está pasando por este trance. Ahora está en Barcelona recibiendo tratamiento pero en el centro estamos muy concienciados. Hemos llevado a cabo distintas iniciativas, como la recogida de tiritas para llevar al hospital. Acostumbramos a hacer unas salidas montañeras y hemos preferido venir hoy aquí para aportar algo de dinero y contribuir a la concienciación", explicaba Latasa.

Padres y madres de Herri Ametsa, señaló, pretenden organizar alguna charla adecuada a las edades más tempranas para trabajar el tema del cáncer infantil con los más pequeños. "Es importante saber cómo se cuenta esto a los niños, porque puede tocarte de cerca. Cuando esto pasa nos quedamos sin saber cómo comunicarlo", apuntó esta joven madre.