Personal

Lugar de nacimiento: Mieres (Asturias). Edad: 52 años (13 de julio de 1969). Familia: Está casado y tiene tres hijas.

Es cierto que muy pocos espectadores conocían a José Andrés cuando en 2005 se puso al frente de 'Vamos a cocinar con José Andrés'. Llegaba a TVE para sustituir a Karlos Arguiñano, vaya papelón, porque el de Beasain había decidido cambiar de cadena. Durante tres años, el asturiano tuvo que abrirse camino en la cadena pública con la sombra del guipuzcoano siempre detrás. Lo que muchos no imaginaban de este hombre discreto y con una fuerza impresionante en su discurso gastronómico era la fama que llegaría a tener en EE.UU., donde ya atesoraba larga carrera, ni sus relaciones con los poderosos de ese país. Relaciones que siempre ha utilizado para dar de comer a miles y miles de personas desfavorecidas, porque el apoyo al débil siempre ha sido para él bandera.

La cocina y José Andrés comenzaron su historia de amor cuando el asturiano tenía años, y desde entonces no ha habido ni altibajos ni desamores. Siendo muy joven su familia se trasladó a Barcelona y era él quien se encargaba muchas veces de la comida en casa. Siendo casi un adolescente puso sus ilusiones en manos de Ferrán Adriá y entró en El Bulli. A los 21 años decidió cambiar la Ciudad Condal por EE.UU. atendiendo a una oferta que le hizo el restaurante Paradis Barcelona.

Tras su aventura neoyorquina y después de haber trabajado en otros restaurantes, consideró la idea de marcharse a la capital estadounidense, Washington, y abrir su propio negocio. Con muchas dudas y ciertos miedos, pero muy decidido, lo hizo: inauguró el restaurante de tapas Jaleo. Todo un éxito y la primera piedra para una carrera que no ha dejado de crecer y evolucionar desde los primeros 90.

A lo largo de su vida la televisión, esa de la que ahora está fuera de cámara, ha sido una especie de Guadiana que aparecía y desaparecía. Después del programa en TVE, José Andrés ha hecho televisión en EE.UU. y ha aprovechado sus espacios también para alabar la cocina española, de la que siempre habla maravillas.

Es un hombre de firmes convicciones y durante la época Trump mantuvo fuertes enfrentamientos con el presidente del tupé anaranjado, algunos de los cuales incluso llegaron a los tribunales. Sus disputas acapararon grandes titulares en la prensa de EE.UU., nacionalidad, por cierto, que Andrés tiene desde hace años. Sin embargo, el chef asturiano mantuvo una larga relación de colaboración y amistad con Obama, quien le alabó públicamente.

Ha sido nominado dos veces al premio Nobel de la Paz por su compromiso con los afectados por los desastres naturales y está muy implicado en misiones humanitarias, por lo que ha recibido diversos reconocimientos. En su currículo tiene más premios relacionados con su actividad humanitaria que con la cocina. Es premio Princesa de Asturias de la Concordia 2021 por su labor en la ONG World Central Kitchen. Durante los meses más duros de la pandemia se volcó, a lo largo y ancho del planeta, para conseguir que la gente que peor lo estaba pasando tuviera qué llevarse a la boca y un refugio aceptable. En muchas ocasiones él mismo se ha encargado de repartir la comida. Es, por ello, hombre popularísimo y muy querido, en su país de nacimiento y en el de adopción. Hoy, ya con barba cana, sigue caminando por el mismo sendero.