Los Carabineros italianos arrestaron anoche a nueve jóvenes, 7 de ellos menores de edad, por la violación el pasado mes de agosto de dos niñas de 10 y 12 años en Caivano, una localidad situada cerca de Nápoles con graves problemas de delincuencia, mafia y abandono y que tras los hechos visitó la primera ministra, Giorgia Meloni.

Las órdenes de detención fueron dictadas por el juez de instrucción del Tribunal de Menores de Nápoles después de la petición de los investigadores que están reconstruyendo los actos de violencia ocurridos en varias ocasiones en el municipio, informaron en una nota.

Según los medios, se habría llegado a estas detenciones por algunos vídeos que llegaron al teléfono de un familiar de una de las víctimas.

Tras el suceso, la Policía ha realizado dos redadas en la zona contra el tráfico de droga y la criminalidad.

La primera ministra, la ultraderechista Giorgia Meloni, visitó la zona tras el suceso, que causó gran conmoción en el país, tras ser invitada por el párroco de la localidad, Maurizio Patriciello, y aseguró que "pronto se verán los frutos de esta visita" tras reconocer que "en Caivano se ha consumado el fracaso del Estado".

Tras la violación grupal, el Gobierno también aprobó un decreto ley contra la delincuencia juvenil con el que será más fácil que los menores acaben en la cárcel, aunque se han quedado fuera otras medidas más controvertidas, como la de rebajar la edad de responsabilidad penal o prohibir el acceso de los menores a las web pornográficas.

El "decreto Caivano", que tomó su nombre de esta localidad donde se produjo la violación de las dos niñas, también castiga con penas de cárcel a los padres que no escolaricen a sus hijos.