Tener espacio suficiente en el baño a veces puede ser algo complicado si tenemos un espacio reducido.

Las toallas y los productos de limpieza e higiene ocupan mucho espacio y saber dónde colocarlas puede ser un auténtico quebradero de cabeza.

Para ello, cada vez existen más baldas, estanterías o repisas que ocupan poco espacio pero gracias a su altura nos permiten organizar mejor los productos de nuestro baño.

Es el caso de Ikea, que ha lanzado la estantería BROGRUND, sencilla y con carácter. Se trata de una repisa de acero inoxidable que por 19,99 euros ofrece la opción de tener orden en el baño con un aspecto moderno. Detalles como los tornillos ocultos se suman al diseño de líneas limpias.

Estantería BROGRUND de Ikea

Estantería BROGRUND de Ikea Ikea

Optimiza el espacio

Una estantería en el baño no solo aporta orden y funcionalidad, sino que también optimiza el espacio, permitiendo mantener todos los productos de higiene personal y las toallas al alcance de la mano.

En un espacio como el baño, donde cada metro cuadrado cuenta, la organización es clave para crear un ambiente práctico y cómodo. Las estanterías son una solución versátil y accesible que mejora tanto el aspecto visual como la funcionalidad del baño.

Tener una estantería permite organizar productos de higiene como champús, geles, lociones y otros artículos de uso diario, manteniéndolos siempre a la vista y listos para usar. Esto ayuda a evitar que los productos queden desperdigados, lo que facilita el acceso y mejora la higiene del espacio.

Además, mantener estos elementos organizados contribuye a reducir el tiempo que pasamos buscando lo que necesitamos, agilizando nuestra rutina diaria.

Las estanterías también son ideales para almacenar toallas de diferentes tamaños, desde toallas de mano hasta toallas de baño, lo que garantiza que siempre haya toallas limpias a mano. Colocarlas en la estantería permite que se mantengan secas y bien ventiladas, evitando la acumulación de humedad.

En conclusión, una estantería en el baño es una solución práctica que aporta orden, mejora la estética del espacio y facilita la rutina diaria.

Acero inoxidable en el baño

El baño es un espacio donde la humedad y el agua están constantemente presentes, lo que hace que la elección de materiales sea crucial para garantizar la durabilidad y funcionalidad de los muebles. En este sentido, una estantería de acero inoxidable, como la BROGRUND de Ikea, es una excelente opción, ya que ofrece resistencia a la corrosión y al óxido, problemas comunes en entornos húmedos.

A diferencia de otros materiales que pueden desgastarse o deteriorarse con el tiempo, el acero inoxidable mantiene su apariencia y funcionalidad sin necesidad de un mantenimiento intensivo.

Mejor higiene

Esta resistencia al óxido no solo garantiza una vida útil más prolongada de la estantería, sino que también ayuda a mantener la higiene en el baño, ya que es fácil de limpiar y no retiene bacterias ni hongos.

Además, el acero inoxidable aporta un toque moderno y elegante que se adapta a la decoración de cualquier baño, proporcionando una solución estética y práctica.

Con una estantería de este material, es posible organizar toallas, productos de higiene y accesorios sin preocuparse por el desgaste provocado por la humedad. En resumen, una estantería de acero inoxidable es una inversión en calidad, durabilidad y limpieza para el baño.