El dueño del quiosco y despacho de Loterías de Arrasate que ha validado el boleto ganador del Euromillones de este viernes, se ha mostrado "alucinado" por haber "repartido" 54 millones, uno de los mayores premios caídos nunca en Gipuzkoa, y porque además es "dificilísimo" hacerlo en un sorteo que "se juega en toda Europa".

"Es un pelotazo", ha declarado este sábado a Efe Zunbeltz Auzmendi, que ha asegurado que no ni tiene idea de quién ha sido la persona agraciada, pues por el centro comercial donde está situado su despacho pasan clientes de la comarca guipuzcoana del Alto Deba pero también de municipios cercanos de Bizkaia y Araba.

Desde que su madre, ya jubilada, dio en 2008 un premio de unos 700.000 euros en un sorteo de la Primitiva, ningún otro boleto vendido en su despacho receptor, el número 66.455, había tenido la suerte de resultar agraciado, pero ahora ha superado cualquier expectativa.

"No me lo he creído"

"Cuando he llegado al centro comercial esta mañana, alguien me lo ha dicho en el aparcamiento -ha explicado- pero no me lo he creído y he pensado que era una inocentada por adelantado".

El boleto acertante le ha costado al agraciado 2,5 euros si apostó sólo para un día o 5 euros si lo hizo para los dos días de sorteo que tiene a la semana el Euromillones y que este viernes ha otorgado el bote millonario de 54.026.007 euros que estaban en juego para los premiados de primera categoría (5 números más dos estrellas).

Ha dado en la diana

El agraciado ha dado en la diana al poseer el único boleto acertante de la combinación ganadora, la formada por los números 22-32-48-12-36 y las estrellas 3 y 4.

"Una gran alegría para el que le haya tocado", ha indicado Auzmendi, que no obstante le ha augurado también "un buen dolor de cabeza porque ¡a ver qué hace con tantos millones!".

Gran expectación en Musakola

Al quiosco de periódicos y despacho receptor de Auzmendi, ubicado en la pequeña galería comercial en la que está el hipermercado Eroski, en el barrio Musakola de Arrasate, se han acercado este sábado algunos curiosos y varios trabajadores de las tiendas de alrededor.

El orgulloso vendedor ha lucido y mostrado en su comercio un cartel en el que se puede leer en euskera "Premio millonario, vendido aquí", junto a la cantidad agraciada destacada en rojo.

Una empleada del Eroski ha dicho además a Efe que la lluvia millonaria ha sido esta mañana tema de conversación entre la plantilla del hipermercado y que la persona agraciada "no está entre los trabajadores de este hipermercado, "al menos, entre los del turno de mañana".