Una vez que los tripulantes del barco Maria Reina Madre han sido rescatados sanos y salvos, los esfuerzos estaban puestos ahora mismo en tratar de recuperar la embarcación. Tal y como ha confirmado el Delegado del Gobierno español en Euskadi, Denis Itxaso, el barco se encontraba en aguas territoriales francesas, por lo que era quien le correspondía decidir si se remolca hasta el Puerto de Pasaia o, en cambio, se lleva hasta uno galo. Al final ha terminado hundiéndose.

El navío se encontraba escorado a estribor a casi nueve millas de distancia del puerto pasaitarra y, por el momento, no hay riesgo de hundimiento. Tampoco se ha detectado ningún tipo de fuga o vertido al mar.

De este modo, la incógnita ahora ha estado puesta durante gran parte de la mañana en dar con la mejor forma de arrastrar el barco y decidir su puerto final. "Hay que valorarlo rápido porque en días de invierno como hoy oscurece pronto y hay que ver si es mejor traerlo a Pasaia, con la dificultad que tiene su acceso, o pensar en un puerto francés", ha apuntado Itxaso. 

El barco, con bandera francesa, ya había cruzado hacia aguas galas. No obstante, durante la deliberación, el de Pasaia seguía siendo el puerto más cercano. Por el momento, se desconocen las causas por las que se ha abierto una vía de agua. "Lo más importante es que los tripulantes se encuentran bien, más allá del susto por tener que evacuar el barco y la preocupación ahora porque pasará con él, ya que es una pérdida económica importante", ha agregado el Delegado del Gobierno español.

El barco María Reina Madre se hunde frente a la costa de Pasaia

El barco María Reina Madre se hunde frente a la costa de Pasaia Salvamento Marítimo