Donostia – El centro vasco de investigación en nanociencia, CIC nanoGUNE, trabaja en la modificación de las fibras textiles mediante la infiltración de nanómetros que dan a los tejidos propiedades hidrófobas, antimicrobianas o de protección a los rayos ultravioleta.

La investigación, liderada por el grupo de nanomateriales, se enmarca dentro de un proyecto Elkartek en el que participan también el centro tecnológico Gaiker que testea las propiedades finales de las telas tratadas y la empresa textil Andromeda Moto, que proporciona las telas.

La nanotecnología puede constituir una “aliada indiscutible” para el desarrollo de nuevas fibras que otorguen nuevas propiedades a las prendas haciéndolas más resistentes, impermeables, protectoras ante los rayos ultravioleta, antimicrobianas o repelentes a manchas.

Con este objetivo, nanoGUNE ha combinado las técnicas denominadas de “deposición de capa atómica” e “infiltración en fase vapor” para incorporar partículas nanométricas de materiales biocompatibles como el óxido de titanio o el óxido de zinc a las fibras textiles.

De esta manera, “se modifica la naturaleza de tejidos comunes como el algodón, el poliéster o el nailon, dándoles nuevas propiedades”, señala la investigadora Natalia Chamorro.

“Se ha observado una gran mejora en la impermeabilidad de ciertos tejidos, que han pasado de empaparse bajo la lluvia a repeler el agua. Asimismo, gracias al estudio de ciertas bacterias, se ha proporcionado a ciertos tejidos, como el algodón o el tejano, propiedades antimicrobianas y antiolor”, añade.

Además, la tecnología ha dado buenos resultados en cuanto a durabilidad y estabilidad del recubrimiento en los procesos de lavado, ya que las partículas nanométricas siguen sujetas al textil.