Euskadi busca convertirse en agente principal y no en mero espectador ante los retos del futuro. Para ello, el Gobierno Vasco llevará a cabo la mayor inversión de su historia en ciencia con el proyecto Basque Quantum, que colocará a la CAV “entre los mejores del mundo” en investigación cuántica y que tendrá su punto álgido a finales del próximo año, cuando el nuevo edificio de Ikerbasque en Donostia acoja el superordenador IBM Quantum System One, que será instalado por un centenar de trabajadores de la compañía. Para ello, el departamento de Educación contempla una inversión de 50,8 millones de euros, una cifra que ascenderá hasta superar los 120 millones en 2028 al contemplar el apoyo a varios proyectos de investigación y la construcción de algunas infraestructuras en toda Euskadi.

“No sabemos lo que nos depararán los ordenadores cuánticos, pero sí sabemos que Euskadi tiene que estar lista para los retos del futuro. Este acuerdo es un reconocimiento a nuestro país, a su potencial y a sus investigadores”, ha reconocido este viernes el lehendakari Iñigo Urkullu en el acto de presentación del proyecto Basque Quantum en Tabakalera de Donostia, al que han asistido numerosos representantes institucionales, como los consejeros Jokin Bildarratz, Pedro Aspiazu, Arantxa Tapia, Gotzone Sagardui y Olatz Garamendi; los tres diputados generales, Markel Olano, Unai Rementeria y Ramiro González; el alcalde de Donostia, Eneko Goia; responsables de IBM y empresarios e investigadores vascos como Pedro Miguel Echenique y el presidente de CAF, Andrés Arizkorreta.

El pasado 18 de marzo, el consejero de Educación firmó en la sede de IBM de Nueva York el acuerdo entre la empresa norteamericana e Ikerbasque, la Fundación Vasca para la Ciencia, la ambiciosa apuesta que traerá a Euskadi el sexto superordenador cuántico del mundo y segundo de Europa. En torno a él, además, se desarrollará todo un ecosistema de investigación que se expandirá por los tres territorios de la CAV, convirtiéndola “en lider a nivel mundial de uno de los campos científicos más estratégicos”.

Así, entre las principales acciones presentadas este viernes, alguna de las cuales ya se encuentran en marcha, se halla crear los nuevos centros Ikerbasque, DIPC (Donostia International Physics Center) e IBM-Euskadi Quantum Center, así como nuevos laboratorios de investigación. También se contempla diseñar un programa para la atracción de proyectos y centros internacionales de investigación; reforzar los programas educativos y de atracción de talento; e impulsar la innovación pública y privada asociada a la cuántica.

Todo ello será, en palabras del director de IBM, Horacio Morell, “un hito histórico y tecnológico” no solo para Euskadi y el Estado, también para el sur de Europa, ya que el proyecto Basque Quantum está llamado a convertirse en un ecosistema cuántico líder de clase mundial para toda esta región. En la actualidad, solo cinco países cuentan con un nodo de supercomputación cuántica en el mundo –Estados Unidos, Japón, Canáda, Corea del Sur y Alemania– y, de ellos, únicamente uno está en Europa.

Un supercomputador para Donostia

La alianza firmada entre el Gobierno Vasco e IBM solo ha sido posible gracias a un trabajo previo llevado a cabo durante años. “El plan de ciencia tiene que tener en cuenta la academia y la empresa. Es más que adquirir una tecnología, es apostar por la investigación de vanguardia e invertir en nuestro propio futuro”, ha asegurado el lehendakari, al tiempo que ha recordado que el proyecto “va a colocar a Euskadi entre los mejores del mundo” en ciencia cuántica.

Misma reflexión han compartido el resto de ponentes, como el consejero de Educación, que ha señalado que el acuerdo es “un trabajo de equipo” entre instituciones y agentes vascos que lleva a la CAV “a un gran reto por delante”. 

No obstante, aunque el proyecto contempla varias acciones para los tres territorios, Gipuzkoa y, especialmente, Donostia, se contempla como el principal foco de acción al acoger el supercomputador. Lo hará, concretamente, el nuevo edificio de Ikesbasque, que se construirá junto al campus de la UPV/EHU de Donostia en Ibaeta, entre la actual instalación del Centro Nanogune y la futura nueva sede del DIPC, que convertirán a la zona en todo un referente de investigación científica. 

Además, para la construcción y puesta en marcha del aparato, será necesaria la presencia de un centenar de trabajadores de IBM, que se encargarán del complejo trabajo de instalación. La previsión es que esta labor esté lista de cara a finales del próximo año. “Este acuerdo es fruto de una larga apuesta que comenzó hace 20 años con el DIPC. Queremos ser un país de ciencia de excelencia y, para ello, realizamos múltiples esfuerzos para traer centros de investigación”, ha agregado el diputado general de Gipuzkoa, Markel Olano.

El futuro edificio contará con un total de 6.000 metros cuadrados con 80 laboratorios de investigación que acogerán a 300 investigadores que desarrollarán proyectos en torno a materias como la computación cuántica, la neutrónica, supercomputación, química avanzada, nuevos materiales y polímeros.