La Fiscalía se opuso ayer a la petición de absolución por parte de la defensa de Carmen Merino, condenada el pasado diciembre a 15 años de prisión por matar a su novio en 2019 en Castro Urdiales, y hacer desaparecer su cuerpo salvo el cráneo, que entregó a una amiga. En la vista de apelación celebrada ayer en la Sala Civil y Penal del Tribunal Superior de Justicia de Cantabria (TSJC), el fiscal y la acusación particular, que representa a familia de la víctima, pidieron que se ratifique la sentencia por los “múltiples indicios” de la culpabilidad de la condenada, frente a su defensa, que argumentó que se ha  vulnerado su presunción de inocencia.

Merino, quien permanece en la prisión de El Dueso y estuvo presente en la vista, fue condenada por matar a la que era su pareja, un vizcaino de 67 años, “con la intención de aprovecharse económicamente de los bienes y dinero” de él.