El número de atenciones a personas migrantes en el recurso de referencia habilitado por el Gobierno Vasco en Irun descendió el año pasado un 20%, según un primer avance de datos facilitado a este periódico por la Dirección de Migración y Asilo del Ejecutivo vasco. La presencia de mujeres en el conocido como centro de Hilanderas crece paulatinamente, pero el perfil mayoritario de quienes hacen un alto en el camino en Gipuzkoa antes de proseguir su travesía hacia el norte sigue siendo el de un joven de 24 años, de Guinea Conackry y Malí, principalmente.

La Dirección de Migración y Asilo del Gobierno Vasco realiza estos días el balance de actuaciones del año pasado en los diferentes recursos habilitados. Un informe que presentará en la mesa de coordinación institucional que será convocada durante el primer trimestre de 2023, todavía sin fecha. Un balance de año en el que hay que lamentar de nuevo la muerte de dos personas en su intento por alcanzar el otro lado de la muga.

El senegalés Ibrahim Diallo, de 24 años, falleció ahogado en aguas del río Bidasoa el pasado 12 de marzo. Abderraman Bas, de Ginea Conackry y con 25 años recién cumplidos, se convertía el 18 de junio en la novena víctima. Dos nombres que se sumaron a una lista negra que comenzó a escribirse en el fatídico 2021, con siete personas ahogadas a partir del mes de abril, junto a otras tres arrolladas en Ziburu. Una tragedia que comenzó el 18 de abril de 2021, cuando fue hallado el cuerpo sin vida del joven eritreo Tessfit Temzide, que se había quitado la vida junto al río.

El Gobierno Vasco ha realizado durante este pasado año todas las gestiones necesarias para contactar con los familiares de Ibrahim y Abderraman, con el fin de llevar a cabo el reconocimiento de los cadáveres y su posterior repatriación.

Plan de Contingencia desactivado

Dos hechos luctuosos en un año, por otra parte, marcado por el acusado descenso de la presión migratoria, hasta tal punto que no ha sido necesario activar el Plan de Contingencia, como sí ocurrió en 2021. “A pesar de disponer de un recurso nuevo, con lo establecido ordinariamente ha sido suficiente para absorber todos los flujos de llegada”, confirma a este periódico Xabier Legarreta, director de Inmigración y Asilo del Gobierno Vasco.

Un descenso de la presión migratoria en Gipuzkoa que se corresponde con el del conjunto del Estado. La inmigración irregular ha descendido un 25,6% en 2022, pasando de las 41.945 llegadas en 2021 a las 31.219 en 2022. Así lo refleja el último Informe quincenal de inmigración irregular, actualizado a 31 de diciembre y publicado la semana pasada por el Ministerio del Interior. La reducción es más acusada en las entradas por vía marítima, que muestran una caída generalizada en las costas de la península, Ceuta, Islas Baleares y Canarias, tanto en el número de inmigrantes irregulares como en el de embarcaciones.

El descenso más significativo se produce en las Islas Canarias, donde los inmigrantes irregulares se redujeron en 6.634, desde los 22.316 hasta los 15.682, una disminución del 29,7% respecto a 2021. Un año muy activo en el que se llegó a atender a 8.115 personas en el centro de Hilanderas de Irun, gestionado por Cruz Roja. Fue la cifra más elevada de los cuatro años previos.

El actual, mucho más tranquilo, es un escenario más propicio para reforzar el trabajo coordinado que se viene realizando a ambos lados de la muga, y cuyo punto de inflexión se produce con otra muerte: la del joven Sohaibo Billa, fallecido el 20 de noviembre de 2021. Es a partir de esta fecha, como reconocía este jueves Legarreta, cuando el lehendakari, Iñigo Urkullu, y el presidente de la Mancomunidad Vasca de Iparralde, Jean-René Etchegaray, hicieron pública una declaración conjunta en la que expresaron su "dolor y máxima inquietud" ante los "dramas mortales" que se venían sucediendo en el paso fronterizo.

Compartiendo "datos y buenas prácticas" a ambos lados

Un año después de aquel “compromiso humanitario”, la dirección de Inmigración y Asilo del Gobierno Vasco indica que se ha estrechado la coordinación con las administraciones del otro lado de la muga, especialmente con el Ayuntamiento de Baiona y el Departamento de Aquitania. Muestra de ello, desde enero de 2022 Iparralde forma parte de la mesa de trabajo interinstitucional. “Estamos compartiendo datos, buenas prácticas y experiencias, y existe una comunicación directa entre nuestros recursos y los que están al otro lado de la muga”, detalla Legarreta, en alusión al centro Pausa, que atiende en Baiona a migrantes en tránsito.

Otra línea de trabajo fundamental en la gestión pública del hecho migratorio es la comunicación abierta y permanente del Gobierno Vasco con el de Canarias. Y lo es teniendo en cuenta que la mayor parte de las personas que llegan Irun han entrado a la península por las islas. “Sigue siendo para nosotros importante seguir manteniendo esa comunicación fluida para que nos informe de los movimientos que se van produciendo. Hasta la fecha, el Gobierno de Canarias nos ha venido detallando cuáles eran los flujos de salida de los migrantes de las islas a la Península”. Advierte Legarreta de que no se trata de una previsión certera al 100%, pero de alguna manera sí que ambas realidades son vasos comunicantes. “Nos permite hacernos una idea de la presión migratoria que puede registrarse en Irun al cabo de mes y medio”. En la actualidad, es la ruta canaria la que empuja precisamente el balance de llegadas irregulares hacia abajo en el conjunto del Estado. Las entradas de migrantes por vía irregular a Canarias, la que requiere la travesía más peligrosa, habían aumentado en la primera mitad del año. Pero en la última quincena de septiembre, el número de llegadas fue por primera vez más bajo que el de 2021, y el resultado global del año es de una caída del 29,7%.

Pese a todo, la Dirección de Migración y Asilo del Gobierno Vasco continúa desplegando campañas informativas "para que las personas que llegan al recurso de Hilanderas conozcan de primera mano los peligros que encierra cruzar a nado el río Bidasoa", alerta Legarreta. Un material didáctico que está traducido a varios idiomas.