La Sección Tercera de la Audiencia de Sevilla ha celebrado este martes el juicio previsto contra la mujer acusada de presuntos delitos de prostitución y de maltrato en el ámbito familiar sobre su propia hija menor de edad, así como de un supuesto delito de continuado de abusos sexuales en calidad de cooperadora necesaria; y contra un varón acusado de presuntos delitos de prostitución y abusos sexuales continuados respecto a dicha menor.

Durante el juicio, la acusada, identificada como Nuria M.G., ha explicado que en el momento de los hechos, allá por el verano de 2018, ella vivía en un piso de la calle Pablo de Rojas con cuatro de sus ocho hijos, incluyendo a la entonces menor de edad víctima de las presuntas actuaciones sometidas a juicio. En aquellos momentos, según ha manifestado, esta hija suya aún estaba a unos meses de cumplir los 18 años de edad.

En cualquier caso, Nuria M.G. ha asegurado que "nunca" ofreció a su hija de entonces 17 años para relaciones sexuales con terceros a cambio de dinero, desligándose del anuncio publicado en la página web Pasión.com respecto a la menor, un anuncio en el que se publicitaban una mujer de 35 años y una joven de 18.

Además, ha asegurado que el número de teléfono móvil con el que fue insertado dicho anuncio no era su número "personal", sino que se trataba de un teléfono que su familia usaba "para la casa", con lo cual ella no estaba al tanto del tráfico de mensajes del terminal, según ha asegurado.

En paralelo, ha negado que ofreciese su hija al otro acusado, José Antonio T., a quien conocía "del barrio", para relaciones sexuales a cambio de dinero ni que ella tuviese relaciones sexuales con este segundo inculpado. "Jamás le concerté nada a mi hija", ha aseverado.

Al punto, sí ha admitido que agredió a su hija cuando el 27 de octubre de ese año supo "todo" lo que hacía su hija al descubrir un mensaje en el citado teléfono móvil relativo a un encuentro entre su hija y José Antonio T. La menor, según sus palabras, le "dijo" que se prostituía porque "tomaba drogas" y necesitaba ingresos con los que pagar los estupefacientes.

LLAMADAS A LA POLICÍA

En ese sentido, ha asegurado que ella se negaba a que su hija tuviese contacto con el citado acusado, exponiendo que cuando pocos meses después la joven cumplió los 18 años de edad, abandonó el domicilio familiar y "se fue con él". "He llamado 20 millones de veces a la Policía para que recogiera a mi hija de la casa de ese señor", ha aseverado.

José Antonio T., de su lado, ha explicado que en junio de 2018, la menor se le "insinuó" asegurándole que ella era mayor de edad y que su madre "sabía" de sus prácticas, con lo que a su entender ambas estaban "de acuerdo", toda vez que según sus palabras, "las dos eran consumidoras" de drogas y la madre "exigía" a la menor "una parte" de lo que recaudaba mediante sus servicios sexuales.

Además, ha manifestado que él contrataba los servicios sexuales de la joven porque le daba "pena" y quería que ella tuviese "algo de dinero". En paralelo, ha asegurado que esperaba que al contratar sus servicios, la joven no tuviera "más clientes" que pudiesen "maltratarla".

"ELLA ME MINTIÓ"

"Ella me mintió", ha dicho con relación a la edad de la víctima, asegurando que si la menor fue a vivir con él cuando cumplió los 18 años fue porque "surgió de ella" y él la apoyó porque en el domicilio familiar, la menor estaba sujeta a "peleas" y exigencias de su madre. "Yo miraba por el bien de ella", ha enfatizado.

También ha prestado declaración como testigo la joven víctima de los supuestos hechos, quien ha asegurado que José Antonio T. supo "desde siempre" que ella menor de edad, acusándole de mantener relaciones sexuales con todas las cinco menores que entonces formaban su grupo de amigas. "Es un adicto al sexo", ha dicho acusando a José Antonio T. de aprovecharse de ella y del resto de menores, en un contexto en el que las mismas consumían alcohol y drogas pese a su edad. Ella, como ha concretado, consumía cocaína y una mezcla de dicha sustancia con heroína.

Según su relato, ella misma colgó el mencionado anuncio en la página web Pasión.com "guiada" por José Antonio T., que según su versión de los hechos alquilaba habitaciones de su vivienda para encuentros sexuales concertados a cambio de dinero. Según ha asegurado, ella ofrecía sus servicios sexuales "a escondidas" de su madre, usando el teléfono móvil familiar, para conseguir dinero con el que pagar las drogas y "súper manipulada" por José Antonio T.

DENUNCIA POR MALOS TRATOS

"Mi madre no se enteraba. Yo le quitaba el móvil", ha aseverado asegurando que José Antonio T. le "llevaba" sus actividades de prostitución y que cuando cumplió la mayoría de edad optó por residir con él porque el mismo le habría prometido "dinero, ropas" y recursos. Tras vivir "tres años" con él, según su relato, le ha denunciado por violencia de género y ha regresado al hogar familiar.

Según el escrito de acusación de la Fiscalía, recogido por Europa Press y previo al juicio, Nuria M.G. está acusada de un presunto delito de prostitución sobre su hija menor de edad y de un delito de maltrato en el ámbito familiar también sobre su hija, siendo además acusada de un supuesto delito de continuado de abusos sexuales, pero en este último caso en calidad de cooperadora necesaria.

Merced a tales calificaciones, el Ministerio Público pide para ella un total de 17 años y nueve meses de cárcel. Además, solicita que se imponga a la acusada 21 años de prohibición de acercarse a su hija o comunicarse con ella, así como una multa de 5.400 euros.

Para José Antonio T., la Fiscalía reclama 15 años de cárcel por presuntos delitos de prostitución y abusos sexuales continuados, en ambos casos como autor.