vitoria - El cadáver hallado en la mañana de ayer por los trabajadores de la planta de biocompost del polígono de Jundiz, en Vitoria, corresponde a un hombre de 37 años que no presentaba signos de violencia que apunten indicios de criminalidad, según confirmó el Departamento vasco de Seguridad.

Otras fuentes conocedoras de este caso precisaron, por su parte, que el fallecido es un hombre de origen magrebí, cuyo cuerpo llegó a este centro de reciclaje en un camión de residuos, que probablemente recogió el contenido de un contenedor en el que podría hallarse el fallecido.

El cuerpo sin vida de este hombre fue descubierto en torno a las 8.00 horas por los empleados de este centro de reciclaje de residuos en una de las cintas transportadoras.

Los investigadores de la Ertzain-tza señalaron que el cadáver sí presenta contusiones, pero las atribuye a los golpes que pudo recibir el cuerpo al pasar del contenedor de reciclaje en el que se encontraba al camión de transporte que lo condujo hasta Jundiz, y de ahí a la planta de procesamiento de biocompost.

Se desconoce cómo pudo llegar el cuerpo al contenedor y los investigadores esperan conocer el resultado de la autopsia para tratar de esclarecer las causas de la muerte que, en principio, parece no violenta.

Desde que apareció el cuerpo, la planta de biocompost se cerró para permitir a la unidad de Policía Científica de la Ertzaintza llevar a cabo la investigación de este suceso.

Una comitiva judicial acudió después para proceder al levantamiento del cadáver, que fue trasladado al Instituto Anatómico Forense para hacerle la autopsia. - Efe