ari@s remer@s de la Eusko Label Liga y la Liga Euskotren queremos expresar nuestra inquietud en relación a las decisiones tomadas por los clubes en la asamblea del 30 de mayo sobre los aspectos relativos al protocolo sanitario, la normativa de competición y el manual de organización de regatas, que, bajo nuestro punto de vista, no han sido debidamente elaborados.

Dos días antes de la citada asamblea, para nuestra sorpresa, se presentó una nueva versión del protocolo sanitario desde la ACT, mucho más light que la anterior, la cual se analizó y se le plantearon modificaciones (junto a propuestas de otra índole) a lo largo de casi cuatro semanas por parte de los integrantes de los clubes. No obstante, en esta nueva versión del protocolo las medidas establecidas se reducían considerablemente respecto a la anterior (por ejemplo, se disminuían los test semanales a tres para toda la temporada). L@s remer@s consideramos inaceptables los tiempos que se han manejado en esta nueva propuesta, además de que no se haya tenido en cuenta nuestra opinión respecto a las reducciones planteadas.

Todos somos conscientes de la naturaleza de las regatas: aglomeraciones de personas, interacción directa entre público y deportistas (material incluido: contacto con la trainera, remos, botes, herramientas...), etc. Consideramos que las medidas concretas a llevar a cabo y su aplicación están incompletas en este nuevo protocolo light. Siendo las medidas de distanciamiento social la principal medida de prevención establecida en este nuevo protocolo, nos preocupa que no se haya establecido una normativa ad hoc para su aplicación en las regatas y que la directiva de la ACT derive la responsabilidad sin ningún pudor a los organizadores de cada evento.

Ni la normativa ni el protocolo contemplan ningún escenario futuro de rebrote de COVID-19 o empeoramiento de la situación sanitaria. Desde la dirección de la ACT se indica que la normativa en vigor (la misma que años anteriores) ya contempla las posibles situaciones en los que existan problemas de participación de los clubes. Se considera esta afirmación inasumible debido a la situación tan atípica que tiene lugar este año. Al no haber sido actualizada en ningún aspecto, consideramos que este hecho generaría situaciones de controversia. Por ejemplo, en caso de que un club tuviese varios afectados por COVID-19, el permiso de no acudir a una regata dependería exclusivamente de la deliberación de una persona (juez de competición). Resumiendo, no se contemplan medidas concretas frente a un futuro escenario sanitario grave.

Vemos que, con objeto de permitir la viabilidad económica de la liga y los clubes, por un lado, se han reducido al mínimo los controles para una rápida detección del COVID-19 y, por otro lado, se ha dejado de lado la necesidad de tener duchas habilitadas para después de la competición, disponer de vestuarios en condiciones, etc. Sin embargo, se va a mantener el barco VIP de las autoridades, siendo una clara evidencia de que la liga prioriza el aspecto comercial frente a la salud de los deportistas.

Haciendo hincapié en las prioridades de la liga, es muy significativo que en el manual de organización de regatas se hayan contemplado varios escenarios relativos a delegados, jueces, autoridades y otros agentes que toman parte en las regatas, pero que no se hayan contemplado en el mismo a l@s remer@s. Es un claro ejemplo de ello el caso de servicios portátiles destinados a jueces, medios, delegados, etc., pero no a l@s deportistas. No queremos extendernos en exceso en este apartado, por lo que os animamos a leer el manual en cuestión, donde l@s remer@s tienen el menor peso específico entre todos los agentes involucrados. En conclusión, la liga y la mayoría de los clubes que lo componen han hecho todo lo posible para tener este verano una liga totalmente normal, sin ninguna excepción o cambio de reglamento, con un protocolo sanitario pobre y un manual de organización en el que l@s remer@s apenas han sido considerad@s. Se ha demostrado que han prevalecido los intereses económicos y deportivos ante la salud de l@s remer@s. Con lo cual, nos vemos obligados a arriesgar nuestra salud y la de los que nos rodean sin medidas suficientes y con la carga extra que ello conlleva.

Por todo esto, solicitamos lo siguiente a la liga y a los clubes:

-Que recapaciten sobre las decisiones tomadas en la asamblea del 30 de mayo y se tengan en cuenta las consideraciones del colectivo remero ante esta situación de crisis sanitaria.

-Que se redacte un protocolo específico donde se asuma la aplicación correcta de las medidas tanto en las regatas como en los entrenamientos.

-Que se modifique el manual de organización de regatas, de modo que contemplen y prioricen las necesidades de los deportistas.

-Que el reglamento de competición, el manual de organización y el protocolo sanitario contemplen las medidas a tomar en el caso de que hubiera una propagación del COVID-19 en cualquiera de las embarcaciones que participan.

Los remer@s que firmamos este manifiesto queremos que los clubes que la componen y la directiva de la liga tengan en cuenta nuestras solicitudes. Creemos que tanto nosotr@s como la gente de nuestro entorno que puede verse afectada por la disputa de la liga en las condiciones que se han aceptado, merece esta reflexión.

Remer@s de la Eusko Label Liga y la Liga Eusko Tren

- Los remeros y remeras de la máxima categoría publicaron ayer un comunicado en el que mostraron su disconformidad por las medidas tomadas de cara al arranque de las próximas competiciones. Los bogadores denuncian que el nuevo protocolo presentado para garantizar las medidas sanitarias es demasiado “light” y que no se habían tenido en cuenta sus opiniones. Entre las medidas tomadas, consideran que es “inaceptable” que se haya pasado de realizar un test semanal a hacer solo tres durante toda la temporada. Piden, además, que se realice una reflexión sobre las decisiones tomadas en la asamblea del sábado. También reclaman un protocolo que establezca las medidas a tomar en los entrenamientos y en las regatas teniendo en cuenta el aspecto organizativo y primando su salud.

“Se ha demostrado que se ponen por delante los intereses deportivos y económicos a la salud de los remeros. Por lo tanto, nos sentimos obligados a poner en riesgo nuestra salud y la de la gente que nos rodea”, indican.

Otra de las preocupaciones de sus es que se den positivos por COVID-19 durante la temporada. “El reglamento no contempla que la situación vaya a peor. La directiva de la ACT indica que la normativa actual ya contempla los problemas para participar en una regata. Esta afirmación nos parece inaceptable teniendo en cuenta la situación que estamos viviendo”, apuntan.