Mes de junio, guerra de canteras. La Real Sociedad continúa con la prioridad de evitar la fuga de talento guipuzcoano, sobre todo ante la amenaza constante del Athletic. Según ha podido saber este periódico, el club ha tenido que hacer un esfuerzo económico importante y excepcional para hacerse con la contratación de Julen Sarasola, al que pretendían el club rojiblanco y el Real Madrid.
Nacido en Donostia en 2014, se trata de un futbolista que viene destacando mucho con la camiseta celeste en el puesto de volante y que, por lo tanto, se incorporará este verano a Zubieta.
Pero en esta eterna batalla, en la que se están traspasando demasiados límites por parte de todos los clubes y en lo que urge que algún organismo dictamine unas reglas de convivencia y respeto, el club txuri-urdin se ha hecho con los servicios de un portero de la generación de 2013, concretamente del Alavés Alevín A. Se trata de Asier Alegre, de Vitoria, y el fichaje ha soliviantado especialmente al club babazorro, al que le han sorprendido las formas porque, al parecer, se lo ha comunicado muy tarde cuando el acuerdo estaba cerrado desde hace ya tiempo con la familia del futbolista.
Por si fuera poco y para más inri, el Athletic, que no suele avisar, ha incorporado a otros dos jugadores albiazules de 2013, los que estaban considerados como los más destacados. Se trata de Lander Abasolo, el capitán, y su delantero centro, Gonzalo Segura.
Tanto Alegre como Segura llegaron en su día a Ibaia desde el Ariznabarra, que es un club vitoriano convenido de la Real, mientras que Abasolo lo hizo del Abetxuko, que tiene un contrato de colaboración con el Athletic.