Si el estado de la enfermería txuri-urdin no fuera ya lo bastante preocupante, Aihen Muñoz ha tenido que abandonar el terreno de juego de Balaídos con visibles muestras de dolor en su rodilla izquierda. En una primera exploración se apreció una torsión en esa rodilla, con una posible afección en el ligamento cruzado. El jugador deberá someterse a más pruebas para conocer el alcance exacto de su lesión, aunque todo apunta a que podría sufrir una rotura en el ligamento cruzado de su rodilla izquierda y que podría perderse toda la temporada. El propio Imanol se expresó en estos términos tras el partido y ha dedicado el triunfo al jugador: “Es lo triste y lo feo del fútbol. Queremos dedicarle este triunfo a Aihen porque es un chico que ya ha sufrido una lesión de cruzado, y estos chicos cuando se vuelven a romper enseguida se dan cuenta. Todavía no se le han hecho las pruebas pertinentes, pero tiene pinta de que va a ser una lesión de cruzado”.
En el minuto 39, el lateral de Etxauri se fue al suelo tras presionar a un rival, e inmediatamente se llevó a las manos a la rodilla izquierda, pidiendo el cambio al banquillo realista y con claros signos de preocupación.
Aihen dejó el campo en camilla mientras se llevaba las manos a la cabeza, siendo sustituido por Kieran Tierney. Mikel Oyarzabal, que se encontraba en el banquillo, acompañó al vestuario al navarro, que ya sufrió una rotura de ligamento cruzado en la misma rodilla en 2016.
Barrenetxea, Martin Zubimendi, Álvaro Odriozola y Carlos Fernández no pudieron viajar a Vigo por lesión, mientras que Kubo y Traoré se encuentran concentrados con sus selecciones.
