La Real Sociedad puede conseguir en el próximo partido de la fase de grupos, en Anoeta contra el Benfica, un pase a octavos de final de la Champions al que el martes por la noche le ha dado un empujón en Lisboa.
Por el momento, solo una combinación de resultados certificaría el pase de ronda, un éxito que el club guipuzcoano no logra desde la temporada 2002/2003. Si entonces tuvo que esperar a la última jornada y a un cabezazo de Óscar de Paula contra el Galatasaray en Anoeta, en esta ocasión el mismo escenario puede ser testigo del mismo logro, aunque con dos jornadas de antelación.
Para ello debe derrotar el próximo 8 de noviembre de noviembre al Benfica en Donostia (18:45 horas) y que el Inter repita en Austria el triunfo de este martes en Milán contra Red Bull Salzburg (21:00 horas).
Con esos dos resultados, al grupo D solo le quedarían dos misterios: conocer el líder que tendrá derecho a jugar la vuelta de los octavos en su feudo, y quién se llevará la tercera posición y podrá seguir en competición europea, al caer al play-off de la Europa League, la ronda que la Real jugó años atrás contra United y Leipzig, y que la temporada pasada evitó al liderar el grupo.
En el caso de que esa combinación no se dé, la Real dispondría de una bala directa la quinta jornada, de nuevo en Anoeta, contra el Red Bull Salzburg. Mientras la opción más directa del Benfica para superar a la Real pasa por que los de Imanol pierdan los tres partidos que restan y los portugueses ganarlo todo, los austríacos se hallan a cuatro puntos de los donostiarras (y nerazzurros), por lo que en casa contra el Inter y en Gipuzkoa afrontan dos duelos a vida o muerte.