Arsen Zakharyan va a ser anunciado oficialmente como nuevo jugador de la Real en las próximas horas. El tercer fichaje txuri-urdin para esta temporada ha pasado esta mañana el pertinente reconocimiento médico, que ha superado sin problemas, en la Policlínica Gipuzkoa, para acudir después a las oficinas de Anoeta, donde ha firmado su contrato y ha atendido a los medios del club. Pasadas las 15.00 horas ha abandonado el estadio pasando completamente inadvertido para los aficionados allí presentes o los que hacían cola para intentar hacerse con las últimas localidades que se ponen a la venta en día de partido. 

Finalmente, han sido las cámaras de los medios rusos los que le han delatado y se han acercado varios seguidores para pedirle un autógrafo o solicitarle una fotografía. A Arsen se le ha visto muy tímido y callado, como un poco intimidado por todo lo que está viviendo, pero no ha escatimado sonrisas para todo aquel que se le ha acercado.

Para evitar aglomeraciones, finalmente la cadena rusa Nobel Arustamyan que es el propietario, y el periodista Philipp Kudryavtsev, han llevado al mediapunta delante del mural de Arconada, Artola y Esnaola, que corona la entrada de la sociedad del Lehengokoak. Allí, en colaboración con NOTICIAS DE GIPUZKOA, ha podido conocer más detalles de su nuevo club, su entorno, su afición y del nivel de presión que va a tener a nivel de medios de comunicación. Zakharyan se ha mostrado encantado con las respuestas que ha recibido y se ha interesado por los protagonistas del citado mural. Nada más acabar, se ha marchado con celeridad porque tenía cita con los gestores realistas para almorzar y regresar a Anoeta para ver por primera vez a su equipo ante el Celta. Algo que le apetecía mucho, según ha reconocido a los medios de su país.

Lo que está claro es que sigue teniendo presente al Dinamo, ya que estaba siguiendo su partido en el móvil contra el CSKA cuando ha salido de Anoeta.