La Real Sociedad cayó derrotada ante el Athletic este sábado en San Mamés (2-0), en el derbi correspondiente a la 29ª jornada de Liga. En una primera parte de mucho sufrimiento, los txuri-urdin se vieron superados por un rival que volcó el juego al sector de Yuri y Nico Williams, con Merino, Zubeldia y Gorosabel padeciendo para ajustar marcas. El cambio a 4-3-3 tras el descanso asentó luego a los de Imanol Alguacil, cuya principal fuente ofensiva estuvo en las internadas por banda de Ander Barrenetxea. Esta vez faltaron finura e incluso osadía para lograr unas conexiones interiores que, cuando se produjeron, tampoco terminaron en gran cosa. Este es el análisis táctico del encuentro.

Así salieron ambos equipos al campo. ATHLETIC: con Dani García como pivote y adelantando a Vesga al interior. REAL: 4-4-2 en rombo con un matiz. Imanol situó a Merino en la derecha, consciente de que el izquierdo (Yuri-Nico) era el lado fuerte del rival en ataque.

La primera clave del derbi residía en cómo se iban a presionar los unos a los otros. Por influencia en el transcurso del partido, arrancamos con la estructura defensiva de una Real que sin balón conservaba el rombo. Merino y Brais compensaban fuera saliendo a por Yuri-Capa.

Valverde demostró tener estudiada la situación descrita y la trabajó de la siguiente manera. Extremos (Nico-Iñaki) muy dentro para atraer a Gorosabel-Aihen y vaciar bandas. Laterales (sobre todo Yuri) altos. Vesga baja a recibir dentro y hace dudar a Merino. Diagonal Unai-Yuri.

Esos envíos de Unai a los laterales, más a Yuri que a Capa, hicieron daño a una Real cuyo técnico reclamó tras el partido "más valentía y agresividad" defensiva. Todo apunta a que echó de menos ver más este movimiento en acordeón (flechas blancas) para defender al hombre en la zona 'conflictiva'.

De hecho, el ajuste del míster en el descanso cambiando a 4-3-3 tuvo su principal razón de ser en buscar ese uno para uno en la parcela blanca. ¿Cómo organizó a los suyos?

Lo vemos aquí en formato de captura de pantalla, con el propio 4-3-3 mutando a lo siguiente. Aihen sale a por Capa, con Le Normand haciéndole la cobertura con Iñaki. Barrene salta a Yeray. En el otro lado Kubo se queda con Yuri, Merino se centra en Vesga y Aritz marca a Nico.

La Real se ajustó mucho mejor en la segunda mitad... Pero para entonces ya perdía 1-0, ante un Athletic que, lejos de conformarse con las diagonales iniciales a Yuri, supo mezclar su amenaza en la zona jugando también por dentro. Vemos aquí un ejemplo con la acción desde la que se gesta el córner del primer gol. Los de Imanol sí han saltado esta vez con Gorosabel al lateral y con Zubeldia a Iñaki (cambiado de perfil). Sin embargo, Sancet cae a la zona, fija a Merino y permite a Iñigo enganchar fácil con Vesga.

Así logró el Athletic ser superior a la Real durante la primera parte, dentro de un partido en el que, además, su presión se veía superada por los txuri-urdin en muy pocas situaciones. Como en Anoeta, Valverde retrasó a Guruzeta con Zubimendi para igualar el rombo. Imanol, mientras, introdujo los siguientes matices: Merino cae a doble pivote, arrastra a Vesga y el rombo se convierte en cuadrado. Mientras, Kubo fija a Yuri escorándose a extremo derecho.

Desde este punto de partida, la Real demostró manejar una buena serie de alternativas para intentar superar el bloque alto del Athletic. 1- En los primeros minutos no arriesgó y buscó los envíos largos a Merino, único destinatario de juego directo con Sorloth en el banquillo.

2- El equipo supo también que, con las disposiciones vistas en la anterior imagen de pizarra, encontrar libre a Gorosabel (Kubo fijaba a Yuri) era una posibilidad.

3- Había plan B si Yuri dejaba a Kubo (Iñigo se ocupaba de él) y saltaba a por Gorosabel: Remiro lo detecta aquí y busca la caída de Oyarzabal a la espalda de Vesga.

4- Silva también se movió por esa zona derecha con cuya búsqueda quiso innovar Imanol respecto a la primera vuelta: en Anoeta trató de salir por la izquierda y en San Mamés intentó ir al otro costado. Oyarzabal fija centrales, Kubo a Yuri y Zubimendi a Vesga: recibe libre el canario.

5- Y buscando todas estas ventajas también vimos a la Real dibujar un 3-4-3 (cuadrado en la medular) con Gorosabel de tercer central y Aihen como extremo, esquema mediante el que Imanol buscó provocar el salto a la presión de Guruzeta que desprotegiera la medular del Athletic.

6- En la segunda parte, el Athletic reaccionó al cambio txuri-urdin a 4-3-3 presionando en 4-4-2 con Sancet en primera línea. Y la Real siempre demostró ser consciente de que dentro podía enganchar con Merino o Silva a la espalda de los pivotes locales.

Pero al equipo le faltaron, en líneas generales, finura y también atrevimiento para encontrar unas conexiones interiores que, cuando se dieron, tampoco se tradujeron en excesivas oportunidades. No fue una tarde especialmente inspirada en el último tercio de campo. Así, el principal peligro txuri-urdin respondió a la decisión de Imanol de cambiar el lado fuerte en ataque, trasladarlo a la izquierda (con un notable Barrenetxea) y dejar a Kubo (luego Cho) pinchado en la derecha para buscar unos contra unos 'limpios' ante Yuri. No hubo acierto para empatar y el Athletic consiguió el segundo gol para decantar un partido que, con sus momentos y sus alternativas, merecieron ganar los rojiblancos en líneas generales.