- Real y Athletic reeditan la final de la Copa del Rey solo cuatro días después en partido de Liga. Todo un año para esperar a la madre de todas las batallas, y solo unas cuantas horas para disputar la revancha en el derbi de vuelta de la Liga. Esta vez se encuentra mucho más desequilibrado por la necesidad de ambos conjuntos, ya que la Real está obligada a ganar si no quiere perder el tren de los puestos europeos tras los acelerones de Villarreal y Betis, mientras que los rojiblancos se encuentran en tierra de nadie, a diez puntos en la clasificación, y obligados a cosechar una auténtica hazaña para lograr el pasaporte europeo vía Liga. Por si fuera poco, los de Marcelino deben dosificar esfuerzos ya que en diez días afrontarán su segunda final de Copa en dos semanas que, además, trae consigo una clasificación para volver al Viejo Continente.

La Real se presenta a la cita resacosa por el triunfo, pero responsabilizada por no haber celebrado apenas al ser plenamente consciente de la importancia que tiene este nuevo derbi. Imanol se ha convertido en un auténtico especialista ante el eterno rival, al que le tiene tomada la medida y contra el que solo ha mordido el polvo en una ocasión. No hay que olvidar que en el campeonato de la regularidad sufrió dos derrotas consecutivas ante Granada y Barcelona, por lo que tienen que reaccionar ya, sin importarle el adversario que se va a encontrar enfrente ni la rivalidad histórica que mantenga con el mismo. Solo le vale ganar. El Athletic no es un enemigo fiable cuando llega herido tras una de las derrotas más duras de su historia reciente. Seguro que se presentará a la cita con ganas de vengar la afrenta de La Cartuja.

La final dejó secuelas graves en la Real. Illarramendi y Silva se van a perder el próximo mes de competición y Merino, uno de los grandes héroes de Sevilla con ese pase medido, es duda por sus problemas en la espalda. Además se espera que alguno de sus jugadores descanse. Remiro seguirá en la meta, con Gorosabel, Zubeldia, Le Normand y, si está bien, Monreal en la zaga. Zubimendi y Guevara volvieron a formar un doble pivote escalonado, con Merino, si puede, por delante. Januzaj, Carlos y Oyarzabal podrían ser los elegidos arriba, sin olvidar a Barrenetxea ni a Isak.

El Athletic hará bastantes cambios, aunque no parece que modifique demasiado su planteamiento y lo que busquen más sea un cambio de actitud, que fue lo que decepcionó a Marcelino. Capa, Balenziaga, Unai López, Vesga y Villalibre pueden ser algunas de sus novedades.