- A la primera, un susto de campeonato. Martín Zubimendi se tuvo que retirar en el minuto 55 del partido entre España y Eslovenia (3-0) correspondiente a la primera fase final del Europeo sub-21. El donostiarra encendió todas las alarmas cuando tuvo que ser asistido en la banda de unas molestias en la cadera, la zona en la que se lesionó en los días previos a la visita al Granada. Concretamente, en el “músculo obturador externo”. Aunque lo normal era que no jugase ni en tierras andaluzas ni ante el Barcelona, lo que provocaría que se quedara sin acudir con la selección al Europeo, su voluntad por participar en un evento de este calibre fue decisiva para que forzara y reapareciera el pasado domingo. Solo tres días después, sin tiempo para el descanso, Luis de la Fuente decidió arriesgar al considerarle pieza clave en su sala de máquinas, pero apenas aguantó hasta el minuto 10 de la segunda mitad, en el que tuvo que ser sustituido. Según explicó el técnico riojano, lo cambió a tiempo por precaución al sentir alguna molestia, pero esperaban que se recuperase sin excesivos problemas. Habrá que seguir de cerca su evolución, porque de confirmarse una recaída, no tendría más remedio que volverse a casa y encima estaría casi descartado para participar en la final de la Copa, en un duelo en el que contaba con posibilidades de ser titular.

El que se mostró mucho menos diplomático en su respuesta acerca de si iba a tener en cuenta la final de Copa fue Luis Enrique. Con su habitual falta de mano izquierda, el asturiano quiso dejar claro que nada ni nadie va a modificar sus planes para estos encuentros valederos para la clasificación para el Mundial de Catar 2022: “Yo soy seleccionador de España y tengo que centrarme en buscar lo mejor para la selección en estos tres partidos. El resto no lo puedo controlar, ni lo quiero controlar. No me interesa lo más mínimo lo que suceda a partir de ahí. Me centro en que la selección juegue esos tres partidos con los mejores jugadores que yo considero para intentar ganarlos”.