- El triunfo ante el Alavés vino acompañado de una bonita estadística para Imanol Alguacil. Tras una de sus peores semanas desde que se sienta en el banquillo txuri-urdin, logró su victoria número 50. Las alcanza al cumplir los 111 partidos oficiales, en los que ha cosechado 30 empates y 31 derrotas. Los últimos técnicos que llegaron a ese exitoso registro con la Real fueron Ormaetxea en 1980, en solo en 84 partidos, y Toshack, en 105 partidos. Un dato digno de constatar el del galés, que además revolucionó un club que no lograba entrar en la modernidad después del inigualable conjunto campeón que dirigió el malogrado eibartarra.

Los registros de Imanol también son muy relevantes. Porque los logra en otra época de enorme competitividad, frente a rivales muy poderosos en presupuestos y con una filosofía clara sustentada en la cantera y en un estilo de juego alegre y ofensivo. Como declaró Olabe en su última comparencia pública, “la progresión que ha experimentado Imanol desde que entrena al primer equipo ha sido brutal”. Lo cierto es que, aunque la temporada era larga y repleta de trampas por las cinco competiciones que debía afrontar el equipo, el doloroso 0-4 no puede esconder los buenos resultados en Liga, donde el equipo va quinto con cuatro puntos de distancia sobre el Villarreal y con la ansiada final de la Copa de la pasada campaña, el gran logro del oriotarra, todavía por disputar. Las eliminaciones de la Supercopa y de la presente edición del torneo del KO, ambas muy justas y con un debatible componente de injusticia, han acabado por dejar un gusto amargo más que nada por las expectativas que había generado el propio equipo.

A día de hoy, tal y como está el fútbol de exigente y de falto de memoria, sin duda provoca que las 50 victorias de Imanol en 111 partidos sean unas cifras a tener muy en cuenta. Y las que le quedan, porque pocos entrenadores están menos discutidos que Imanol.

Una de las patatas calientes que se le presentan en un futuro cercano al técnico es como plantear la vuelta del 0-4 en Old Trafford. Habrá que ver si plantea rotaciones o si, como no vuelve a jugar hasta el lunes en Valdebebas contra el Madrid, repite con uno de sus onces preferidos. Al término del choque ya declaró que para la Real “no podía ser un marrón” en un templo como el del United.

La expedición txuri-urdin, que ha tenido que ser reducida a su máxima expresión, pasará dos noches en Manchester. Como el partido es a las 21.00, el viernes se ejercitará en las instalaciones del City dadas las buenas relaciones con los citizens, donde están Txiki Beguiristain, Lillo y Manzisidor.

La expedición realista pasará dos noches en Manchester y el viernes entrenará en las instalaciones del City