- Lo anunciaron a bombo y platillo en la previa del sorteo: "Tendremos 100.000 calendarios posibles para determinar las jornadas de la próxima temporada". Además, el calendario vuelve a ser asimétrico, por lo que los enfrentamientos en la ida y en la vuelta entre dos equipos no coincidirán según la jornada (por ejemplo: los partidos de la fecha 1 no serán los mismos que los de la 20). Por ello se escucharon tantas carcajadas en Donostia cuando el número premiado -el 12.751, de 99.999- dio como resultado un Real-Athletic el 4 de abril, el mismo día en el que está previsto que se dispute la final de Copa atrasada. "Las habituales casualidades del fútbol español", pensaron muchos. Pero no, todo indica que este emparejamiento ha sido uno de los condicionantes que ha puesto la Federación Española en el bombo.

El Real-Athletic de Anoeta, por tanto, se disputará en otra fecha, a determinar por ambos clubes. Con esta excepción se facilita notablemente la posibilidad de que los dos finalistas de Copa puedan retrasar su partido liguero de la jornada 29, la correspondiente al fin de semana en cuestión, a otro día sin alterar los calendarios de otros dos clubes de la máxima competición, en un curso tan complejo como el actual, con el COVID-19 acechando y complicando el día a día de todos, y dejando secuelas en la organización de los torneos, que estarán, lógicamente, más comprimidos tras el parón.

Despejada la incógnita copera, la Real ya sabe que su primer partido será a domicilio y ante el Valladolid. Los de Imanol Alguacil estrenarán liga dentro de dos fines de semana en Pucela, un campo complejo en el que suma dos empates consecutivos (1-1 y 0-0) en sus dos últimas visitas.

A este primer encuentro, el equipo puede llegar, visto lo visto en los últimos días, con bajas de peso. Además de las ya conocidas de los jugadores con lesiones de larga duración, como es el caso de Illarramendi, Guevara o Sangalli, hay que sumar las lesiones por COVID-19 que tienen aislados en casa a Mikel Oyarzabal y al recién presentado David Silva.

El canario, igualmente, ya tenía previsto comenzar a rodar de manera progresiva, tras finalizar este pasado fin de semana sus vacaciones. Sea como fuere, tanto el capitán como la nueva estrella txuri-urdin esperan estar listos para ser de la partida en el primer gran encuentro que albergará esta próxima temporada Anoeta. Un estreno de curso de altura contra el Real Madrid, en la segunda jornada. Los vigentes campeones, con o sin el exrealista Martin Odegaard -que se recupera de su lesión-, vendrán frescos a Donostia, ya que no jugarán la jornada inaugural -igual que Barça y Atlético- por disputar la Champions en agosto. Los horarios de los primeros partidos de los txuri-urdin, cuya competencia recae en LaLiga, se conocerán próximamente.

Otra de las incógnitas que se iban a despejar ayer eran los partidos ligueros que tendrá que afrontar casi sin descanso la Real mientras disputa la fase de grupos de la Europa League. La necesidad de arrancar más tarde la competición europea propiciará que la primera fase se dispute en apenas mes y medio, entre finales de octubre y comienzos de diciembre. Al respecto, la Real puede respirar tranquila, puesto que ningún pez gordo ha caído en este periodo, que comienza con tres semanas consecutivas de Europa League. Betis y Huesca serán los partidos pre y post de la primera jornada europea; la Real viajará a Balaídos el siguiente fin de semana, y el Granada visitará Anoeta el 8 de noviembre, antes del parón por selecciones.

Sin duda, diciembre será el mes euskaldun de la Real en la próxima Liga. Con Europa de por medio, una vez más, la Real viajará a Gasteiz para enfrentarse al Alavés y recibir al Eibar el 6 y 13 de diciembre, respectivamente, para afrontar el día 30, en la víspera del adiós a este 2020 tan loco, el primer derbi contra el Athletic. Será en San Mamés, en la jornada 16. Una semana antes, el Atlético pasará por Anoeta. Unas navidades de mucho trabajo les esperan a los txuri-urdin.

Y si 2020 se despedirá con un derbi, la fortuna ha querido que de igual manera arranque 2021, con un Real-Osasuna el día 3 de enero. Los Reyes Magos llegarán tres días después a Donostia, y entre los deseos de la plantilla realista estará a buen seguro que sus majestades les deparen buena suerte en enero. La razón, aquí: Sevilla y Barcelona, a domicilio; Betis, en Anoeta, y Villarreal fuera. La cuesta de enero, más real que nunca.

Los txuri-urdin cerrarán febrero visitando el Bernabéu, mientras que el siempre temido por el Barça viaje a Donostia será en víspera de Semana Santa, en la última jornada previa al parón vacacional que, este año, irá de la mano de un acelerón de ilusiones por la final de Copa.

Eufóricos o derrotados, la Real afrontará un final de Liga que se puede considerar asumible. Fácil nunca lo es, pero no cabe duda de que este final de competición será menos temible que el anterior: Huesca, fuera; Elche, en Anoeta; Atlético, a domicilio; Valladolid, en casa; y Osasuna, en El Sadar. El feudo rojillo pondrá punto y final a esta próxima Liga para la Real, que vivirá seguro diferentes rachas, porque en eso el fútbol, con o sin mascarilla, no ha cambiado un ápice. Ahora queda por ver hasta qué punto afectará el COVID-19 al desarrollo del torneo doméstico y si los aficionados txuri-urdin podrán ver a su Real en Anoeta.

Derbis. Los derbis contra el Athletic se disputarán en fechas muy especiales: 30 de diciembre, en San Mamés, y 4 de abril, aunque ese día se disputará la final de Copa. El partido de Anoeta quedará por determinar. Los demás derbis se jugarán los siguientes días: Eibar (13/12 y 25/4), Alavés (6/12 y 21/2) y Osasuna (3/1 y 23/5).

Madrid y Barça. El Madrid visitará Anoeta el 20 de septiembre, y la Real jugará en el Bernabéu el 28 de febrero. Por otro lado, el Real-Barça será el 21 de marzo; el viaje al Camp Nou, el 20 de enero.