DONOSTIA - El guardameta de la Real Sociedad Alex Remiro reconoció este lunes que, a pesar de estar suspendidos los entrenamientos y la competición, la plantilla realista no olvida la final de Copa que tiene pendiente, cuya posible celebración a puerta cerrada "no está en la cabeza de nadie".

El portero blanquiazul ofreció desde su domicilio la primera conferencia de prensa tras la suspensión de entrenamientos, recogida por la web del club, y habló de la gran ilusión de los realistas para esta temporada, ahora en el alero, por la pandemia del coronavirus que ha paralizado el país.

"Se tiene que dar. Todos queremos jugar esa final de Copa y tenemos que pensar en ello para pasar esa energía a los entrenamientos", señaló Remiro, que confía en que finalmente se pueda jugar con público en el estadio de La Cartuja.

"No creo que se juegue a puerta cerrada, pero de ser así y si no hay otra salida, habría que hacerlo", asumió resignado un cancerbero de la Real, que dio también su opinión sobre la presencia en esa final del Athletic, el club del que formó parte hasta la pasada temporada.

"Yo no me lo tomo como una forma de reivindicación, aunque es cierto que será un partido especial, una final y será bonito para la gente", declaró sobre la posibilidad de que para él sea una revancha tras haber salido por la puerta de atrás del club vizcaíno el pasado verano.

Habló además de otros temas, como el modo de mantenerse en forma durante este período de inacción y explicó que el preparador físico de la Real "todas las mañanas" pasa a la plantilla los ejercicios que debe de realizar durante la cuarentena obligada él y los demás compañeros.

"Son ejercicios de potencia, fuerza...pero ahora vamos a empezar a trabajar específicamente nuestra posición", adelantó Alex Remiro, convertido este año en uno de los favoritos de la afición y al que le gustaría tener una canción de ánimo desde la grada.

"Al no participar tanto del juego como un jugador de campo me voy aprendiendo las que cantan", confesó Remiro, que reconoció que le gustaría tener un cántico pero que sea algo espontáneo de los aficionados.