donostia - Hace ya tres años se reencontró con la afición de la Real, en Anoeta.

-¡Qué día! Fue todo muy emotivo. Se me hace muy difícil expresar con palabras mis sensaciones sobre el césped, durante el descanso de aquel partido. Estaba emocionado. Había pasado mucho tiempo desde mi salida del club, y recibir tanto afecto por parte del público me hizo sentir muy orgulloso. Viví uno de los momentos más bonitos de mi vida. Y con esto último no creo que esté exagerando.

El equipo, al que entonces dirigía Moyes, ganó ese día al Espanyol (1-0), pero la aventura del escocés en el club no terminó de funcionar.

-Me marché del estadio contento con el resultado, pero digamos que el fútbol del equipo no me impresionó precisamente. Moyes consiguió que aquella temporada terminara bien, después de un inicio complicado. Pero pienso que su propuesta no se terminó de ajustar al modo en que siempre ha jugado la Real Sociedad.

¿Qué me dice de la temporada que está a punto de terminar?

-Sigo los resultados del equipo todos los fines de semana. El inicio fue muy bueno. Luego hubo una etapa más complicada. Y parece que en este tramo final se han recuperado las sensaciones positivas. ¿La campaña en su conjunto? Te diré que no es fácil competir en la Liga, un campeonato en el que hay muchos buenos equipos. La Real forma parte de ese grupo de escuadras que tan pronto pueden estar en la zona media, mirando hacia abajo si las cosas se complican, como terminar clasificándose para la Europa League o incluso para la Champions. Lograrlo o no depende del nivel que uno ofrezca, obvio. Pero, repito, también influye el gran nivel existente en el torneo. No es sencillo.

¿Puede haber acusado el equipo el desgaste de las competiciones continentales?

-Te obligan a jugar muchos partidos, eso está claro. Y si no que se lo digan al Liverpool, por ejemplo. Pero siguiendo hacia adelante y sufriendo lesiones por el camino, ha conseguido clasificarse para la final de la Champions. La afición lo ha vivido todo con alegría, orgullosa de su equipo.

La campaña actual termina con Imanol Alguacil en el banquillo. ¿Le recuerda?

-(Se lo piensa). No. ¿Estaba en el club durante mi etapa allí?

En el Sanse. Pero en 1990 debutó jugando un único partido, en Oviedo, que usted también disputó.

-Supongo que coincidiríamos en Zubieta, al estar él en el segundo equipo. He seguido su trabajo y pienso que lo ha hecho muy bien en este tramo final de la temporada.

Le llamaba porque justo hoy (ayer viernes) se cumplen 27 años de la última victoria de la Real en el Camp Nou, donde los txuri-urdin cierran la presente Liga.

-¿27 años? Parece que nos vamos haciendo mayores (risas).

Hábleme de sus recuerdos...

-Lo primero que me viene a la cabeza es el Camp Nou. Adoro ese estadio. Mira. En mi primera temporada en la Real jugué dos veces allí. Me estrené con motivo de una eliminatoria de Copa. Ganamos 2-3 y forzamos así la prórroga tras el 0-1 de Atocha (los tantos a domicilio aún no deshacían empates). Yo hice dos goles aquella noche, aunque caímos en la prórroga. Solo unas semanas más tarde, volvimos a Barcelona para jugar un encuentro de Liga. Tras empezar perdiendo por 2-0, conseguimos igualar (2-2) y sumar un punto. Los goles también los hice yo. Y en la temporada siguiente llegó la victoria de la que me hablabas. Volví a anotar por partida doble. Así que ahí queda mi estadística. He jugado tres partidos en el Camp Nou y he marcado seis goles.

Por lo que cuenta, tendrá fresco en la memoria aquel 1-3.

-Claro, por supuesto. Y si no pregúntaselo a mi nieto. Hace unos meses le conté la batallita y no se la creía. Me llamaba mentiroso. Así que le dije que cogiera el ordenador, entrara en YouTube y buscara el partido. Lo encontró. Y entonces sí que me creyó.

¿Qué edad tiene su nieto?

-Doce años.

Me está diciendo que el goleador de la última victoria de la Real en el Camp Nou tiene un nieto de doce años...

-Así es (risas). Ya va siendo hora de repetir, ¿no?

¿Puede conseguirse en esta ocasión? Como hace 27 años, el Barcelona celebra su título de Liga.

-Claro. Es que ahí tienes una de las razones por las que nosotros conseguimos ganar en el Camp Nou. La temporada ya había terminado para ellos, tenían la mente puesta en sus vacaciones. En el actual Barcelona, eso sí, hay buenísimos jugadores. Yo tengo predilección por los dos ex del Liverpool, Luis Suárez y Coutinho. Me parecen grandes futbolistas. Y luego está Messi. Qué te voy a decir de Messi...

En la victoria de 1991, usted marcó el 0-2 y el 0-3.

-El primer gol fue un pase en profundidad de Lumbreras que me dejó solo ante Zubizarreta, aunque lejos de la portería. Él salió a tapar y conseguí marcar con un tiro raso que se coló entre sus piernas. El 0-3, mientras, lo hice a puerta vacía gracias a un servicio de Dalian Atkinson. Yo anoté dos dianas, pero el mejor jugador de la Real en aquel partido fue él, Dalian. Nos adelantó con un golazo y volvió loca a la defensa del Barcelona. No podían pararle.

El partido de mañana seguro que pasa a la historia en clave realista. Se retira Xabi Prieto.

-Tiene que sentirse orgulloso de todo lo que ha logrado. Es un gran futbolista. Pero destacaría por encima de todo que ha sido un jugador leal, muy leal. Ojalá forme parte de la historia de la Real en un futuro, cuando echemos la vista atrás. Estoy seguro de que así ocurrirá.

Para terminar, le pregunto por la final de la Champions. La mayoría de la afición realista animará al Liverpool, pero no va a ser nada fácil ganar al Real Madrid...

-Me alegra escuchar eso que me cuentas, aunque también lo entiendo lógico. Entre la Real y el Liverpool existe una vinculación histórica, a raíz de experiencias como las de Toshack, Xabi Alonso o incluso la mía. ¿La final? Yo la veo al 50%. El problema puede estar en los banquillos, ya que los reds tienen muchos lesionados y apenas quedan en la plantilla recambios para los once titulares. Pero si atacamos como podemos y sabemos, vamos a marcar goles. Así que haciendo un buen partido en defensa seguro que tendremos opciones.