Todos sabemos la imagen que ofrece una persona cuando se ha pasado con el alcohol o con otras sustancias peores: está desorientada, le cuesta mantenerse en pie o va dando tumbos... Lo curioso es que esa imagen no cambia demasiado en los animales, por lo menos en una osa parda que ha sido rescatada en Turquía.
Sabiendo que el animal terminó bien, las imágenes producen hasta ternura. La cría de oso pardo fue encontrada deambulando por un bosque de la provincia de Duzce y, por su estado, los expertos creen que habría consumido grandes cantidades de miel de rododendro, que por sus efectos alucinógenos se la conoce como miel loca.
En el vídeo compartido se ve al plantígrado recostado en una camioneta con evidentes signos de desorientación y de debilidad, aunque los veterinarios aseguran que se encuentra en buenas condiciones y que esperan poder liberarla rápidamente en su hábitat natural.