El PNV participó este viernes al máximo nivel en los actos de desagravio de Alemania hacia Gernika por el bombardeo de la aviación nazi a las órdenes de Franco. Su líder, Aitor Esteban, apreció el gesto de Frank-Walter Steinmeier, pero no pudo ocultar su malestar y contrariedad ante el papel del rey español, que acudía prácticamente como convidado de piedra y sin la intención de hacer declaraciones públicas. El presidente del EBB, incordiado por aquellos que se empeñan en decir que el Gobierno español nada tiene que ver con el régimen franquista, terminó aclarando que Alemania ha reconocido su responsabilidad a pesar de que se produjera una ruptura con el nazismo, mientras que la jefatura del Estado español, por el contrario, está ahí después de una transición, y la monarquía fue “puesta por Franco”.

En declaraciones a los medios de comunicación antes de que comenzaran los actos, Esteban pidió al Estado español “el mismo gesto de petición de perdón” que Alemania. El jeltzale reconoció que quizás el gesto de Alemania ha tardado “un tanto” y lo esperaban “desde hace tiempo”, pero era “necesario”. Han pasado 88 años desde el bombardeo, aunque ya antes, en 1997, el entonces presidente Roman Herzog escribió una carta de disculpas. La de este viernes ha sido la primera visita de un presidente alemán in situ para realizar este reconocimiento en el mausoleo de Gernika y ante dos supervivientes.

“Gernika no es un símbolo cualquiera. Representa las atrocidades e injusticias que se han ido cometiendo en diversos lugares del planeta. Pero tengo que decir también que, así como el presidente alemán ha tenido ese gesto, el Estado español también debe hacerlo”, añadió.

En ese punto, desplegó su argumento. “Ya sé que algunos dicen que no es el mismo Gobierno, que era el Gobierno sublevado. Pero el presidente alemán y su Gobierno no tienen nada que ver con el Gobierno nazi, y la jefatura del Estado español está ahí después de una transición, no una ruptura como la que hubo en Alemania. La monarquía fue puesta por el régimen de Franco, se dio de hecho y tuvo que ser aceptada por el régimen que dio lugar a la transición”, puntualizó. Por ello, “si Alemania ha tenido este gesto”, no “entiende” que el rey español venga y no haga lo mismo.

“Si viene aquí, tiene que ser para decir algo con fundamento, para traer más autogobierno, un reconocimiento nacional o pedir perdón”, avisó. No le vio ningún sentido a que venga “después de tantos años a un sitio tan especial” para hacer solo de “acompañante”. “Nos parece sinceramente que falta algo”, reprochó. Cuando hablaba de la visita realizada en el pasado, se refería al polémico viaje a la Casa de Juntas del padre de Felipe VI, Juan Carlos I, en 1981.

Aunque, como partido abertzale, la forma de la jefatura del Estado no es su principal foco de interés, no es la primera vez que el PNV constata que Franco escogió como sucesor a Juan Carlos de Borbón o que critica el rumbo de esta institución. Además de las críticas del experto en la materia, el exsenador Iñaki Anasagasti, el lehendakari ohia, Iñigo Urkullu, ya apostó por “republicanizar” la monarquía con algún tipo de votación que proporcionara una legitimación social a su carácter hereditario.