En Gernika-Lumo esta mañana se respiraba un aire de contención y solemnidad con la llegada del presidente alemán, Frank-Walter Steinmeier, el primer jefe de Estado germano que ha visitado la villa foral para homenajear y pedir perdón a las víctimas y a sus familias por el bombardeo ocurrido el 26 de abril de 1937.

Supervivientes de aquel ataque aéreo y familiares de la víctimas se acercaban ya desde bien temprano este viernes al Cementerio de Zallo, muchos de ellos visiblemente emocionados por poder estar presentes en un acto en el que Steinmeier ha oficializado desde Gernika la petición de perdón de Alemania a las víctimas del bombardeo de la Legión Cóndor alemana y la Aviación Legionaria italiana que, con el apoyo de las tropas franquistas, asoló hace 88 años la villa foral durante la Guerra Civil.

Uno de ellos Emilio Aperribai, uno de los supervivientes, que llegaba "emocionado y muy nervioso" acompañado por su hija Monika. "Hoy es un día de emoción y agradecimiento", manifestaba.

Aperribai, que cuando ocurrió el bombardeo tenía solo 8 meses, se ha mostrado esperanzado que lo ocurrido entonces "sirva de lección para que no ocurra en ningún otro sitio más", aunque ha lamentado que hoy haya personas en lugares como Gaza y Ucrania que tengan que enfrentarse a situaciones tan trágicas como la que le tocó vivir a él.

Aunque en 1997 el entonces presidente alemán Roman Herzog ya pidió perdón por aquel bombardeo, Emilio Aperribai considera "fundamental" la visita a Gernika de este viernes de Frank-Walter Steinmeier. "Que haya accedido a visitar Gernika, un homenaje a las víctimas, es muy muy emotivo", agradecía.

También en la calle este viernes el tono general de las y los gernikarras era de agradecimiento, aunque no ha faltado la coletilla de que se trata de un gesto que llega tarde. Otro comentario que se repetía era el del reproche al Estado español por ser incapaz de realizar un gesto como el de Alemania. Lo ejemplificaba Gustavo, vecino de la villa foral, para quien la asistencia de Felipe VI al homenaje de este viernes es "una payasada". "Lo que tendría que hacer es ir a la Casa de Juntas y jurar los fueros", expresaba indignado.