Donostia - Pablo Iglesias e Iñigo Errejón mostraron ayer en público sus profundas discrepancias respecto a la estrategia a seguir en Podemos. Lo hicieron mediante un cruce de mensajes en Twitter sobre el tono del discurso más conveniente para atraer al electorado, tras unas palabras de Iglesias en la campaña gallega. En un acto celebrado en A Coruña, el secretario general de la formación morada defendió la firmeza en el mensaje, ante la moderación que pide el sector próximo a Errejón. “Parece que la política se ha convertido en un problema de tono”, afirmó en el mitin, antes de defender que “el día que dejemos de dar miedo a los que se enriquecen a costa de la gente, seremos uno más y no tendremos sentido como fuerza política”.

Poco más tarde, el número dos de Podemos le respondió en su cuenta de Twitter: “A los poderosos ya les damos miedo, ese no es el reto. Lo es seducir a la parte de nuestro pueblo que sufre pero aún no confía en nosotros”. Así, Iñigo Errejón dio un paso más en el enfrentamiento que ambos mantienen sobre la estrategia y la organización de la formación morada, que empieza a convertirse en una guerra abierta al público.

Pablo Iglesias no tardó en responder a su compañero de partido en la misma red social y trató de rebatir su reflexión: “Sí, compañero Iñigo Errejón, pero en junio dejamos de seducir a un millón de personas. Hablando claro y siendo diferentes seducimos más”, escribió. El cruce de mensajes evidencia que siguen existiendo dos corrientes con profundas diferencias dentro del partido morado, sobre todo en el debate de cómo aumentar su respaldo electoral.

Más tarde, consciente de la polémica que han suscitado los mensajes, Iglesias añadió en su cuenta de Twitter que, “mientras otros se mandan recados subliminales”, en Podemos están “orgullosos de debatir con las puertas abiertas”. “Ser diferentes es eso”, zanjó. También Errejón se mostró conciliador y dio la razón al último mensaje de su compañero. “Sin duda. Llegamos lejos pensando con categorías propias. Debemos seguir haciéndolo para recuperar nuestro país. Seguimos”, concluyó.

Tras el rifirrafe, la mayor parte de los dirigentes de Podemos salieron en apoyo de Iglesias y sus tesis. El secretario de Organización, Pablo Echenique, aseguró que, “más allá de debates teóricos y estratégicos”, los discursos de su líder le emocionan “como el primer día”. Rafa Mayoral, responsable de Relaciones y Movimientos Sociales, también se mostró partidario de emplear un tono duro en los discursos. “David no venció a Goliat haciéndose el simpático”, publicó en Twitter.

No fueron los únicos. La portavoz adjunta de Podemos en el Congreso, Irene Montero, compartió el vídeo del discurso de ayer de Pablo Iglesias y pidió mostrar los “dientes afilados con los de arriba”. Finalmente, el senador Ramón Espinar señaló que a los poderosos “les da miedo la gente” y que la formación morada debe ser la “herramienta de la gente”. El único que salió en defensa de Iñigo Errejón fue el exsecretario de Organización, Sergio Pascual, que fue destituido por Iglesias en marzo. Eso sí, mostró su apoyo de forma discreta, tan solo compartiendo el mensaje de Errejón en su perfil.