vitoria. Paso a paso, las turbulencias remiten. La convulsión generada tras el paso dado el miércoles por la Fiscalía en la investigación que trata de aclarar una supuesta trama de cobro de comisiones ilegales se apaga al tiempo que las interrogantes políticas abiertas buscan respuesta. El caso es que una vez conocida la consecuencia más notoria derivada de la operación judicial -anteayer llegó la dimisión de Alfredo de Miguel, ya ex diputado foral de Administración Local y Equilibrio Territorial y ex vicepresidente segundo de la Caja Vital Kutxa-, sólo queda por aclarar el futuro de los otros siete implicados en el caso, alguno de ellos, nombres muy conocidos y ligados al aparato del PNV en el territorio histórico.

Esa variable se analizará este mismo lunes en el Euzkadi Buru Batzar, órgano que dirige el sino de la formación jeltzale. Aunque ya podría haber una nueva certeza: Aitor Tellería, miembro de la dirección de la formación nacionalista en Álava, y uno de los detenidos e implicados en la investigación, dimitirá en las próximas horas.

En principio, esa sería la única sorpresa en un contexto en el que el PNV ha adoptado la decisión que podía. Tras estallar el escándalo, se enfrentó a él con un discurso que elevaba a rango de ley recursos de mano dura y de "tolerancia cero" ante los indicios que apuntan a la implicación de varios de sus afiliados en una corruptela política sobre la que recaen las acusaciones genéricas de de cohecho, blanqueo de capitales y tráfico de influencias. Así lo indicó el propio diputado general de Álava, el también jeltzale Xabier Agirre, que no dudó en desprenderse del que era el número tres de su gabinete, De Miguel, al que obligó a dimitir al ser uno de los implicados por la Fiscalía. Y eso pese a que aún nada se ha juzgado y a que el líder del Gobierno provincial respetó y defendió la presunción de inocencia del que fuera uno de sus colaboradores más estrechos.

En cualquier caso, la renuncia de Alfredo de Miguel -único de los implicados en la investigación que ocupaba un cargo institucional- debe de entenderse como una manera de evitar que el proceso judicial abierto salpique al partido y a la misma Diputación cuando queda poco más de un año para las próximas Elecciones forales. En el mismo tono hay que entender la renuncia de Tellería.

El futuro en el PNV de los otros imputados con marcado acento jeltzale, es aún una incógnita. Y lo es porque el secreto del sumario impide conocer detalles de las acusaciones y de los cargos que recaen sobre ellos. En ese sentido, Iñaki Gerenabarrena, presidente del partido en Álava, anunció que se depurarán responsabilidades de ser necesario, aunque indicó a este diario la imposibilidad de actuar o de tomar medidas sin conocer los detalles del proceso. Ante todo ello, se quejó de la indefensión generada por la situación procesal.

Bajo estas premisas, el EBB del PNV analizará el próximo lunes un caso que ya ha marcado a los implicados. Estos, además de Alfredo de Miguel -uno de los hombres fuertes de la formación jeltzale-, son Alfonso Arriola, asesor del Tribunal Vasco de Cuentas Públicas, conocido alcaldable peneuvista y ex director del Parque Empresarial de Miñano; Koldo Otxandiano, ex gerente del Instituto Foral de Bienestar Social; Aitor Tellería, ex concejal, ex juntero y actual burukide; Jon Iñaki Etxaburu, promotor; Iratxe Gaztelu-Urrutia, ex candidata nacionalista al Parlamento Vasco; Ainhoa Bilbao y Araceli Bajo. Todos ellos fueron detenidos el pasado miércoles por la Ertzaintza acusados de un presunto delito de cohecho, blanqueo de capitales y tráfico de influencias y, tras prestar declaración ante el juez, quedaron en libertad con cargos.

Análisis político El EBB, como hace todos lunes, reunirá a su Ejecutiva para analizar los últimos acontecimientos y, entre ellos, estará, por tanto, la detención y, posterior imputación, de varias personas vinculadas al PNV alavés. Precisamente, el presidente del EBB del PNV, Iñigo Urkullu, aunque sin citarlo expresamente, se refirió ayer a estos hechos y defendió que su partido no se va a "desviar ni un milímetro" de valores como la honestidad o la integridad.

Tras lo ocurrido, el diputado foral de Administración Local presentó el jueves su dimisión ante el diputado general de Álava. Éste anunciará el próximo miércoles quién será el encargado de sustituirle en el Ejecutivo foral.